La Policía Local pone 33 multas por exceso de velocidad en Segovia durante el fin de semana

Durante el último fin de semana, la Policía Local ha propuesto un total de 33 multas por superar la velocidad máxima permitida en los puntos donde la policía ha colocado su radar móvil (carretera de San Rafael, Cuesta de los Hoyos, avenida Vicente Aleixandre y calle Dámaso Alonso).

De todas ellas, el máximo responsable de la Policía Local advierte del elevado número de denuncias en las dos calles del barrio de Nueva Segovia, vías que además sirven de entrada y salida al barrio y que conectan con dos calles, como Gerardo Diego y la carretera de La Granja, en las que la velocidad permitida es mayor. Rodríguez Fuentetaja explica que la colocación del radar móvil en Vicente Aleixandre (y también en Dámaso Alonso, aunque en menor medida) obedece en parte a las quejas que los vecinos de la zona han transmitido al Ayuntamiento de la ciudad a través de la aplicación Línea Verde, en las que alertaban de la elevada velocidad de paso de los vehículos por ambas calles.

El intendente jefe de la Policía Local recuerda con la nueva normativa de la Dirección General de Tráfico la velocidad máxima permitida en ambas calles es de 30 kilómetros por hora, al tratarse de vías con un único carril por sentido de circulación. No obstante, recuerda que en el caso de Dámaso Alonso la velocidad ya estaba limitada a 30 o 20 kilómetros por hora en las proximidades del centro de Formación Profesional Felipe VI y del colegio público Elena Fortún. Por su parte, en la Cuesta de los Hoyos no ha habido cambios en los límites de velocidad y tampoco en la carretera de San Rafael.

Por otro lado, Rodríguez Fuentetaja afirma que no está entre los planes de la Policía Local de Segovia la colocación de un radar fijo en algún punto de la ciudad al considerar que se está trabajando bien con los cinemómetros móviles. No obstante, llama la atención de los conductores y les recuerda que el margen de error que utilizan a la hora de colocar los radares es mucho más bajo en vías urbanas que en carreteras convencionales. «El margen de error que se aplica, al hablar de límites de 20 o 30 kilómetros por hora es menor, aunque el porcentaje sea el mismo», señala. Y eso se traduce en sanciones de mayor cuantía económica y con mayor pérdida de puntos del carné de conducir.