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El profesor Eduardo Juárez, con la archivera, Julia Montalvillo, ayer. M. R.
Plató de rodaje por unas horas
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Plató de rodaje por unas horas

Las grabaciones forman parte de un curso ‘on line’ sobre paleografía y caligrafía digital en el que han participado 6.000 alumnos de 78 países

mónica rico

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Martes, 24 de octubre 2017, 12:07

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El archivo de la Casa Ducal de Alburquerque situado en la torre del homenaje del castillo de la localidad se convirtió ayer en un pequeño plató en el que cámaras fijas y un ‘dron’ realizaron distintas tomas de las instalaciones y los documentos más impactantes que guarda el centro. Para ello hasta la localidad se desplazaron dos técnicos, acompañados de los profesores de la Universidad Carlos III de Madrid Eduardo Juárez y José Luis La Torre, que a su vez es subdirector del archivo histórico nacional, quienes estuvieron acompañados de la directora archivera Julia Montalvillo.

Las grabaciones forman parte del curso MOOC (cursos ‘on line’ masivos en abierto) de Paleografía y Caligrafía digital en archivos hispanos medievales y modernos, que ha contado con unos 6.000 alumnos en 78 países de todo el mundo. La grabación se enmarca como parte del video promocional del próximo curso, como para la realización de conversatorios de cuestiones paleográficas y diplomáticas para los alumnos en este curso. Para uno de estos conversatorios se ha contado con la participación de Julia Montalvillo.

Para ello, a lo largo de la mañana de ayer, los técnicos, profesores y la archivera recorrieron las distintas estancias del archivo, como el depósito y la sala de investigadores, captando imágenes de las mismas y los documentos y «a la vez que a los alumnos los enseñamos y les educamos en la lectura de textos antiguos y medievales, también difundimos el patrimonio que atesora el castillo de Cuéllar, el archivo de la Casa Ducal de Alburquerque y esta ciudad», apuntó Eduardo Juárez.

El mismo profesor detalló que la elección del archivo cuellarano viene dado por la unión de varias cuestiones, como una profundidad documental exquisita, las cuotas documentales que van desde el siglo XII hasta la actualidad, destacando el periodo medieval, y su ubicación «en un lugar increíble como es un castillo del siglo XV. El poder grabar en un depósito que es una maravilla, con un contenido maravilloso y un continente increíble, son las razones que hemos tenido para venir a esta ciudad tan bonita», destacó.

La grabación del documental es el colofón a un proceso y curso de digitalización documental en el que han participado unos 40 alumnos durante ocho meses en el que se han conseguido digitalizar unos 700 documentos del archivo. Ahora llega la fase de transcripción, estudio, análisis y publicación, lo que se puede prolongar en torno a un año y medio, teniendo en cuenta que en estos momentos se está terminando la de edición y publicación de los trabajos en pergamino del archivo de la catedral de Segovia, que fue la segunda parte de este proyecto. La tercera fue en el mismo lugar con documentación real en papel, mientras la cuarta fue la llevada a cabo en el archivo cuellarano.

Documentación medieval

Respecto al archivo ducal, los documentos digitalizados son principalmente documentación medieval, aunque en primer lugar se realizaron trabajos de preservación, en la que se digitalizan los fondos que son básicos para la preservación, para contener y mantener la profundidad de ese archivo. Es decir, se trabaja sobre los documentos de mayor importancia, que en el caso de Cuéllar fueron más de dos centenares. El resto de la digitalización se centró en fondos inéditos del señorío de Cadrehíta, asociado a los Duques de Alburquerque y fechados en el siglo XV.

Para el profesor Eduardo Juárez, lo que se busca con este proyecto de investigación es una simbiosis entre el archivo, la universidad, los investigadores y los alumnos. Así, por un lado se beneficia el archivo, puesto que se le digitaliza la documentación, que se difunde, se protege y se le ofrece herramientas para su preservación; mientras que la universidad tiene un proyecto de investigación (que se prolongará seis años), los alumnos aprenden y los profesores pueden publicar e investigar documentación inédita.

Los trabajos de digitalización continuarán próximamente en otro de los archivos de la provincia, en concreto en Martín Muñoz de las Posadas, aunque hasta entonces aún quedan cientos de documentos que gestionar, publicar, analizar y editar, un trabajo que Juárez señaló se prolongará aproximadamente unos dos años.

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