Las nuevas tecnologías ahondan en la brecha entre mujeres y hombres

Basta echar un vistazo a las redes sociales más usadas -Facebook, Instagram, Twitter, Snapchat...- para comprobar que las mujeres también sufren discriminación en as nuevas tecnologías también agrandan la desigualdad entre mujeres y hombres. La profesora de la Cátedra de Estudios de Género de la Universidad de Valladolid (UVA) en Segovia, Teresa Gema Martín, advierte de la existencia de «otra brecha» en el uso de las nuevas tecnologías y de cómo se presentan los casos de violencia sexista en los medios de comunicación, donde sigue habiendo prejuicios y estereotipos.

Este lunes tiene lugar en el campus María Zambrano una jornada de sensibilización y de información sobre 'La mujer ante las nuevas tecnologías de la comunicación' en la que participan diferentes expertas tanto del ámbito universitario y académico como de la publicidad y de las relaciones públicas. Después de tres años, esta iniciativa ha logrado recabar el respaldo del Instituto de la Mujer, han aplaudido los organizadores antes de empezar a desgranar el programa previsto.

«El tratamiento no es del todo adecuado», lamenta la coordinadora del proyecto al referirse a cómo los medios reflejan la violencia sexista. Martín precisa que, aunque «no se hace con mala intención», se detecta una carencia de «sensibilización y de formación». La docente insiste en la necesidad de «educar en igualdad» para erradicar los «micromachismos normalizados» que hacen que «la desigualdad sea muy natural».

En esta línea, el decano de la Facultad de Educación, Andrés Palacios, ha puesto de relieve en la inauguración del acto la necesidad de «revisar asignaturas pendientes para no avanzar a paso de tortuga» en cuestiones relacionadas con la igualdad entre sexos. Aunque la meta de acabar con la discriminación y la violencia machista parece clara, todavía hace falta «saber cómo llegar», ha hecho hincapié Palacios al incidir en «la importancia de la educación en temas como la igualdad o los estereotipos en función de género».

El decano ha subrayado que hay que concretar en las materias a impartir actividades y procedimientos que contribuyan a esa formación.

Las conferencias y ponencias aportan distintas perspectivas de una realidad que «sigue dejando a la mujer en un segundo plano» con respecto al rol que representa el hombre, tal y como ha expuesto la coordinadora de la iniciativa. Uno de los aspectos que se analizan en esta jornada es el de la publicidad.

La profesora Susana de Andrés, también miembro de la Cátedra de Estudios de Género, ha puesto de manifiesto la percepción muy extendida entre la juventud de que las campañas que se llevan a cabo en la lucha contra la violencia machista son eficaces. Así lo piensan el 79% de los consultados una encuesta citada por la profesora, que además revela el alto porcentaje de preguntados que opinan que dichos mensajes también sirven a las víctimas.

Sin embargo, es en el día a día donde se encuentran más micromachismos que 'normalizan' la desigualdad en detrimento de la mujer, según ha apuntado el decano de la Facultad de Ciencias Sociales, Jurídicas y de la Comunicación, Agustín García Matilla. Además de felicitarse por la implicación del profesorado de la UVA en Segovia en la puesta en marcha y participación en iniciativas que promulguen la igualdad entre sexos, el responsable universitario ha ensalzado el trabajo de la Cátedra de Estudios de Género en su objetivo por «reforzar el compromiso social» frente a «la microviolencia cotidiana aparentemente inocua pero que es la base del problema».

García Matilla ha hecho un llamamiento a ser «militantes y activistas» para hacer frente a esos comportamientos discriminatorios asentados y asumidos en el devenir diario. La asunción de esos micromachismos como normales en la sociedad evidencia la «falta de autóritas» de la mujer, lo que desemboca a su vez en su incapacidad de romper el techo de cristal, tanto personal como profesional.

Por su parte, la coordinadora de la jornada ha esbozado algunas de las situaciones que justifican el desarrollo y el sentido de la iniciativa. Así, Teresa gema Martín ha señalado cómo a partir de los cuarenta años, el uso de las nuevas tecnologías de la comunicación por parte de la mujer desciende en comparación con los hombres. Asimismo, la aparición de la mujer en los medios sigue estando ligada a estereotipos relacionados con la imagen o la estética. Y teniendo en cuenta la faceta de la mujer empresaria, la profesora se queja de que ninguna de las grandes compañías tecnológicas de las redes sociales ha sido creada o está dirigida por mujeres.