Navafría: un escuadrón de mujeres en honor a San Sebastián

Es en las festividades de invierno donde mejor se conservan los contenidos rituales y en el caso de Navafría así sucede con la fiesta de San Sebastián (20 de Enero). Tres días antes comienza un triduo en honor del santo, nacido en Milán en el año 302 y que ha quedado para la historia como prototipo de martirios. El día de la fiesta discurre, fundamentalmente, en torno a ocho mujeres, que representan un escuadrón militar, y cada una de las cuales tiene asignado un nombre y un distintivo que las caracteriza: Quitavergüenzas (sable), capitana (palillo), Teniente Capitana (sable) y la del palillo (palillo).

Estas cuatro mujeres son casadas y cubren sus cabezas con una mantilla o toca. Tras ellas, en orden jerárquico, vienen las cuatro solteras, dos mozas y dos niñas, que se cubren la cabeza con montera segoviana adornada con flores, típica del municipio. La moza primera y la segunda portan una bandera y un cuchillón, respectivametne, y el cabo primero y el segundo, también un cuchillón.

Durante los festejos que se celebran por la mañana, las mayordomas visten manteo segoviano de color negro y pañuelo blanco, acudiendo a la iglesia donde se celebra la misa en honor al santo y el mismo es sacado por los maridos de las casadas en procesión por las calles de Navafría, donde componentes de la fiesta y vecinos bailan jotas delante del Santo.

Por la tarde cambian sus manteos negros por los rojos que acompañan de pañuelo negro, que tienen un carácter menos solemne. Al finalizar este período cada una de estas mujeres «echará» a otra para que la siga en su propio cargo.