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Tras las semanas navideñas, en las que encontrar un bar o un restaurante con mesas libres era una misión casi imposible si no se hacía con una reserva previa hecha con días de antelación, uno podía pensar en una vuelta a la rutina sin tantos problemas para poder tomar algo en alguno de los negocios hosteleros del centro de la ciudad. Nada más lejos de la realidad. Por causas totalmente diferentes, estos días resulta algo más difícil de lo habitual poder tomar un café o una calle en Segovia capital.
Javier García Crespo, gerente de la Asociación de Empresarios de Alojamiento, Hostelería y Turismo de Segovia (Hotuse), califica los meses de enero a marzo como la «travesía por el desierto» de la hostelería segoviana. Una época de menos ingresos motivada por una reducción del número de turistas y también de segovianos que salen a la calle. Con temperaturas frías y días cortos, la gente prefiere estar en casa y no sale tanto, sobre todo a partir de las seis o siete de la tarde. «Las noches de estos tres meses son mortales. No pasa por la calle ni el camión de la basura», comenta el gerente de Hotuse.
Por ello, defiende que cada vez más sean los negocios del sector que opten en estas fechas por dar vacaciones a su personal o por acometer las reformas que durante el resto del año han sido imposibles por la gran afluencia de público. Así no extrañan imágenes como la de este miércoles en la Plaza Mayor de Segovia, donde tan solo estaba abierto uno de sus bares o restaurantes. El resto, cerrados con el mobiliario de sus terrazas recogidas.
«Ahora muchos negocios deciden cerrar por completo», afirma Javier García Crespo. Otros, por su parte, han incorporado a su rutina el cierre durante uno o incluso dos días a la semana. «Para qué vas a tener gente trabajando a horas en las que no hay clientes», expone el portavoz de Hotuse, que recuerda que hace no muchos años no había cierres por días de descanso o vacaciones. «Cada uno se va adaptando según pueda. Es lo normal para no echar horas a lo tonto y sin producir. De un tiempo a esta parte, y por la falta de personal, se prefiere cerrar un tiempo en estas fechas y que todo el personal coja vacaciones a la vez», añade sobre una práctica cada vez más común, sobre todo en los bares y restaurantes de tamaño medio o grande que pueden permitirse hace una breve pausa en su actividad.
El cierre temporal permite dar descanso al personal, que no se acumulen días libres para épocas de mayor afluencia de clientes e incluso repartir el negocio. Porque clientela sigue habiendo también en enero, aunque el número de turistas haya bajado. «La gente se concentra en los negocios que están abiertos», comenta García Crespo.
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Uno de las causas que explican este tipo de medidas, cada vez más frecuentes en la hostelería segoviana, es la dificultad para encontrar nuevo personal. «No es un problema solo de este sector. También ocurre con el transporte o la construcción», expone el gerente de Hotuse. «En la hostelería, un buen profesional pone él las condiciones al empresario. Eso lleva tiempo ocurriendo», subraya.
Sin embargo, también reconoce que ya no se puede tirar tanto de extras como se hacía hace unos años. «Desde la llegada de los fijos discontinuos se complicó mucho. Había gente con trabajo que luego echaba extras, pero con este tipo de contratos y dos pagadores se les complicaba un poco la vida», concluye.
La Asociación de Empresarios de Alojamiento, Hostelería y Turismo de Segovia (Hotuse) ha calificado de «bueno» el año para el sector en la provincia de Segovia. Además, ha hecho un balance «muy positivo» de su actividad durante los últimos doce meses. En este sentido, puso en valor su participación en la negociación de la nueva ordenanza de terrazas de Segovia (todavía a la espera de su presentación y aprobación en el pleno del Ayuntamiento) y de otros municipios.
Sus diferentes departamentos jurídico, laboral y fiscal han asesorado a más de 370 empresas segovianas en diferentes asuntos y han atendido más de 700 consultas dentro del proyecto conjunto de la Diputación Provincial de Segovia 'Plan Emprende en Hostelería y Turismo. Más que bares, sin bares no hay pueblos'. La idea de Hotuse es hacer extensivo este programa a los establecimientos de Segovia capital y a sus barrios incorporados.
También están a pleno rendimiento otros departamentos, como el inmobiliario, con su bolsa de locales en venta, alquiler, traspaso junto con la revisión de contratos y puesta en marcha del negocio. Otro muy importante es el de la formación, con más de 200 personas formadas que, junto con la bolsa de empleo, han permitido facilitar más de 1.000 currículums a las empresas asociadas dando trabajo a más de 90 personas.
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Martin Ruiz Egaña y Javier Bienzobas (gráficos)
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