Los contagios del brote de coronavirus en la residencia de Riaza suben a 61

Los últimos datos facilitados este lunes por la Delegación Territorial de la Junta de Castilla y León en Segovia revelan un aumento en la cantidad de casos positivos diagnosticados en el brote de coronavirus declarado a finales de la semana pasada en la residencia de ancianos Rovira Tarazona de la localidad segoviana de Riaza. A lo largo del fin de semana se han pasado de 48 a 61 contagios registrados por los servicios sanitarios, cuando en la residencia conviven 91 usuarios.

Seis de los infectados han necesitado ser hospitalizados en el complejo asistencial de referencia en la provincia segoviana por presentar un cuadro sintomatológico más complicado. Además, la Delegación Territorial de la Junta también da cuenta del estudio epidemiológico llevado a cabo hasta ahora, del que se deduce un aumento en la cantidad de personas en cuarentena al formar parte de la cadena de contactos que se establecido. Ya son 140 bajo control.

La información de la Administración regional matiza que dentro de estos casos que han dado positivo de coronavirus en las pruebas de detección molecular practicadas no solo hay internos, sino que también hay trabajadores y se incluyen personas que no están vinculadas directamente con la residencia. Por este motivo el brote de la residencia riazana se ha calificado, en cuanto a su origen, como «sociosanitario y mixto». Los entornos familiares, laborales y sociales permanecen en estudio por los servicios epidemiológicos tras las encuestas realizadas para definir la cadena de contactos, insisten fuentes autonómicas.

Cabe recordar que cuando se declaró este foco, el más numeroso de los registrados hasta ahora en la provincia, el director del centro , José Encinas, declaraba que la mayoría de los casos positivos que se habían diagnosticado hasta ese momento eran asíntomáticos. Asimismo, aseguraba que se había puesto en marcha el plan de contingencia por el que los ancianos contagiados se hallan en aislamiento y confinados en la cuarta planta del complejo residencial de Riaza; a su vez hay habilitado otro piso entero para la atención covid. A pesar de las medidas adoptadas, uno de los pacientes infectados por la covid-19 falleció este fin de semana.

Este fallecimiento en el ámbito de la atención sociosanitaria eleva a 392 las vidas que se ha cobrado el coronavirus desde el estallido de la pandemia en residencias de la tercera edad y centros de atención a personas con discapacidad.

Por su parte, la Dirección General de Salud Pública, a través del Servicio Territorial de Sanidad de Segovia, mantiene la vigilancia y el control epidemiológico de los cuarenta brotes que a fecha de este lunes permanecen activos en la provincia, tal y como ponen de manifiesto los datos de la Junta.

El Gobierno regional insiste en apelar a la responsabilidad individual y colectiva de los ciudadanos para que cumplan las medidas básicas de distancia social, higiene de manos y uso obligatorio de la mascarilla tanto en vías públicas y ámbitos urbanos al aire libre como en los espacios cerrados de uso o abiertos a la población.

El brote en la residencia explica la situación epidemiológica en la que se encuentra la zona básica de Riaza, que de momento está en el grupo de áreas con un alto porcentaje de positivos sobre el cupo de tarjetas sanitarias pero sin llegar a los parámetros que Sanidad tiene en consideración proponer un confinamiento.

Precisamente la localización concentrada de buena parte de los contagios en el centro es la que frena ese paso adelante en la adopción de medidas restrictivas. Y es que la ratio que arroja el conjunto de la zona básica durante la última semana de primeras PCR positivas sobre 10.000 tarjetas sanitarias es de 89,85, un dato que invitaría a tomas medidas junto al de las 54 infecciones confirmadas en todo el área en siete días.