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Los vecinos arropan a la imagen durante una edición anterior de la romería. A. Tanarro
Carbonero el Mayor se vuelca hoy con su Virgen del Bustar

Carbonero el Mayor se vuelca hoy con su Virgen del Bustar

«La tradición de cuidar a nuestra patrona está en nuestro ADN», afirma la alcaldesa de Carbonero, María Ángeles García

luis javier gonzález

Segovia

Sábado, 19 de mayo 2018, 12:19

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Carbonero el Mayor puede presumir de que su romería tiene denominación de origen. El municipio, que acompañará este sábado a la Virgen del Bustar, cuenta con una cuidada organización social que ha incluido a un gran número de sus vecinos durante años: comisarios, mayordomos y priostes. Y su procesión, que suele rozar las tres horas, conserva una costumbre especial, la de los castillos humanos. «Esta tradición de cuidar a nuestra patrona está en nuestro ADN como carbonerenses. En todos los pueblos hay jotas, pero nosotros hacemos la romería muy nuestra y es algo que intentamos preservar», explica su alcaldesa, María Ángeles García.

La Virgen toma su nombre porque la leyenda dice que se apareció a un pastor al lado de un bustar donde se quemaba carbón. La romería, que se celebra el sábado anterior al domingo de Pentecostés, cuenta con un organigrama que empieza por los comisarios, cuatro matrimonios elegidos por los once concejales del pueblo y el párroco de la iglesia San Juan Bautista. Este año son Javier Antón, Gema Gómez, Sergio García, Vanesa González, Jesús Pedro Sáez, Noelia Herrero, Eduardo García y Sara Senil. Están encargados del mantenimiento de la pradera y de las instalaciones que tienen dentro del santuario.

La labor central la ocupan los mayordomos, que fueron comisarios el año anterior: David García, María Ángeles Herranz, Alberto Arévalo, Celia Mayo, Gustavo Domingo, Alicia Manso, Jesús Gil y Cristina Muñoz. Deben cuidar la imagen de la patrona, la capilla y organizar la romería, desde tocar las campanas a abrir las puertas. El próximo año serán priostes y velarán por el buen funcionamiento. Así lo resumen la regidora: «El primer año aprendes lo que te va a tocar hacer durante el segundo; el segundo lo desarrollas y el tercero velas para que todo siga igual». Además, dentro del santuario se hospedan las dos comisarías de los años previos, que no tienen ninguna representación institucional pero ayudan durante todo el año.

El programa arrancará a las 12:30 horas de hoy con la eucaristía en el santuario de la Virgen. Comisarias y mayordomas van ataviadas con traje negro, teja y mantilla. Después, los mayordomos invitan a un refresco y muchos vecinos comen en la pradera de la ermita. A partir de las 18:30 horas se celebrará el rosario y la procesión. Una vez acabada, habrá una subasta con los artículos que sortean los mayordomos, en especial el pendón de la Virgen, que da derecho a portarlo en las fiestas de septiembre. Otros años ha habido una capa castellana, un mantón de manila bordado, cochinillos, patos, pollos o cuadros. La gran mayoría son donados por vecinos del pueblo y la recaudación va para el mantenimiento del santuario. El pendón ha estado en los últimos años en torno a los 3.000 euros (en tiempos de más bonanza superó los 6.000). Como cierre, a medianoche actuará la orquesta La Huella.

Tres vivas

Durante la procesión, los castillos humanos culminan con tres vivas y un vecino haciendo el pino. La alcaldesa recuerda que Carbonero apareció hace un par de años en una revista de unos de los 'castellers' más antiguos de Cataluña. «Preguntaron cuántas escuelas teníamos. Cuando dijimos que ninguna,quisieron saber: ¿Y cómo aprende la gente? Aprendemos los unos de los otros, de nuestros amigos y familias. Realmente decían que sus castillos nacen de los de Castilla y que apenas había municipios que conservasen esa tradición». Una costumbre que asegura la participación de las nuevas generaciones. «Son ellos quienes hacen los castillos, por más que pueda subir alguien de 60 años, y los que no dejan de bailar durante la romería, una jota tras otra».

García subraya lo especial del fin de semana, «porque la Virgen solo sale dos veces al año de su casa». La otra es durante las fiestas de septiembre. «Cualquier cita religiosa lleva su fiesta profana y el viernes se juntan las cuadrillas, con comisarios de hace tiempo. Es una romería con mucha afluencia y el pueblo siempre tiene las puertas abiertas. Viene gente de los municipios de alrededor y provincias limítrofes». La alcaldesa concluye con la frase que más se repetirá este sábado: «¡Viva la Virgen del Bustar!».

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