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Bruno Martin, con la placa, y Juan Luis Misis. El Norte
Bruno Martín, historia viva de la fotografía segoviana

Bruno Martín, historia viva de la fotografía segoviana

La federación española homenajea al primer presidente-fundador de la AFPS por su trayectoria y trabajo en favor de la profesión

el norte

Segovia

Lunes, 30 de octubre 2017, 11:37

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La jornada anual de calificaciones celebrada por la Federación Española de Profesionales de la Fotografía y de la Imagen (Fepfi) sirvió para homenajear a Bruno Martín Polo, el primer presidente de la Asociación de Fotógrafos Profesionales de Segovia, colectivo que se viste de gala este año con motivo de su 40 aniversario. Nacido en Segovia hace 98 años, Martín Polo comenzó con tan solo 15 años su andadura en el mundo de la fotografía, entrando como aprendiz en el estudio del fotógrafo y pintor Unturbe, al que siempre ha considerado su maestro.

Años más tarde, y después de contraer matrimonio con Fuensanta Fernández, decidió establecerse por su cuenta y montó su estudio profesional, que compaginó trabajando también como fotógrafo en el Hospital de Guadalajara, donde los familiares de los niños que sufrían tuberculosis solicitaban sus servicios para guardar estas fotos como recuerdo. También captó imágenes en las minas de Almadén (Ciudad Real) y en Málaga, y años después retornó a su Segovia natal, donde se convirtió en un auténtico profesional. Eran otros tiempos, la fotografía era la única forma de conservar los recuerdos de los segovianos, sobre todo en momentos tan importante como bodas, comuniones y bautizos. Bruno, junto con otros compañeros de la profesión en Segovia, consiguió establecer un sistema de turnos para que de forma honrada se repartiesen este trabajo entre todos ellos, sin perjuicio para ninguna familia.

En 1977, hace 40 años, Bruno Martín Polo y sus compañeros decidieron crear la Asociación de Fotógrafos Profesionales de Segovia. Durante los primeros años ejerció el cargo de presidente-fundador de la asociación. A lo largo de su vida, han sido muchos sus intentos por conseguir un reconocimiento profesional del arte de la fotografía, en contra del intrusismo que había en aquellos momentos.

Una de sus principales luchas fue, siendo ya presidente de la Asociación de Fotógrafos Profesionales de Segovia y miembro de la Confederación Nacional de Fotógrafos de España, la obtención de un carné profesional de fotógrafo que reconociera el trabajo de estos. También trabajó para que las fotografías que se realizaban para la obtención del carné del DNI siguieran realizándose en los pequeños estudios fotográficos propiedad de familias, consiguiendo así que pudieran seguir viviendo de esta profesión.

El compromiso con la profesión le ha acompañado a lo largo de toda su trayectoria vital. Hoy en día, a sus 98 años, Bruno Martín sigue recordando con especial entusiasmo, cuando cuenta sus vivencias a sus nietos y biznietos, lo emocionante de su profesión.

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