Avanza ajustará la jornada a los conductores de la línea Segovia-Madrid

Los responsables del Grupo Avanza se muestran sorprendidos con la decisión de los conductores que cubren la línea Segovia-Madrid de solicitar la mediación del SERLA (Servicio Regional de Relaciones Laborales) con motivo, según denuncian a través del Sindicato Libre de Transportes, de las jornadas de trabajo de hasta quince horas diarias. «Nos reunimos con ellos (con los delegados sindicales de la empresa) el pasado miércoles y les explicamos que plantearíamos ajustes en la jornada laboral», asevera Julio de Marco, director de la división de largo recorrido del grupo Avanza.

Pero los responsables de la empresa no muestran su sorpresa únicamente con la queja pública realizada por los conductores tan solo unos días después de la reunión, sino también porque no terminan de entender los motivos de sus denuncias. Estas aludían a un exceso de horas, según fuentes del sindicato, de hasta el cien por cien en algunos casos, y de la obligación de realizar la limpieza de los vehículos después de la jornada.

De Marco recuerda que Avanza gestiona desde el pasado 8 de agosto la línea Segovia-Madrid que hasta ese día realizaba La Sepulvedana. «Nosotros subrogamos al total de la plantilla», afirma. «Entonces elaboramos unos cuadrantes que cumplen tanto con la ley como con el convenio que ellos habían firmado», añade el responsable de la empresa, en el que figura un computo de 166 horas mensuales. «Nosotros estamos cumpliendo», declara De Marco en respuesta a la denuncia de los conductores, que aseveran que se han bajado las jornadas de varios empleados al 70% a pesar de hacer más de 200 horas al mes.

Pero también rechaza que desde agosto se den jornadas laborales de 15 horas como denuncian los conductores. «Hay casos que son como si fuera jornada partida», declara para explicar que hay situaciones en las que el conductor, tras realizar un servicio, puede pasar horas hasta que vuelve a conducir, tiempo que no computa como jornada laboral y en la que el trabajador «puede hacer lo que quiera».

Aún así, el representante de la empresa matiza que este tipo de situaciones (en las que pueden transcurrir hasta quince horas desde que se comienza el trabajo hasta que se concluye) son casos excepcionales. «Puede pasar en uno de cada cincuenta turnos».

Para intentar solucionar el problema, asegura que volverán a ponerse en contacto con los trabajadores para comprometerse, en un plazo aproximado de tres semanas, a reajustar los cuadrantes de turnos de los conductores. El mismo mensaje trasladarán al SERLA si les requieren información al respecto.

Por otro lado, también explica De Marco que tras concluir con los servicios el conductor debe repostar el autobús y pasarlo por un túnel de lavado, sin ser necesaria que realice ninguna labor de mantenimiento. «Para eso ya tenemos una empresa que se encarga», indica. Una explicación que contrasta con la queja de los trabajadores, que afirman que después de repostar deben realizar tareas de limpieza como el vaciado de los baños.