La falta de ayudas lastra el sector del pellet

La Asociación Española para la Promoción del sector del Pellet (Apropellets) celebró ayer en la villa su primera asamblea anual, una reunión en la que los socios tenían como objetivos definir el futuro de la agrupación, además de analizar el sector y sus perspectivas. También se hizo balance del primer año de trabajo y organización de la asociación tras la formación de su nueva directiva, y el impulso que se trata de dar al grupo, que aglutina a las principales productoras de pellets de España.

Entre los problemas existentes en estos momentos, según destacó Luz Pardo, presidenta de Apropellets, se encuentran los bajos precios de los combustibles fósiles, básicamente el petróleo y el gas, pero también se han visto afectados por la llegada de unos inviernos con una meteorología cálida para lo que es habitual, lo cual ha frenado el consumo de pellet, no solo a nivel español, sino también europeo.

En España no se está creciendo al ritmo que estaba previsto. Se ha frenado la instalación de calderas de biomasa, principalmente pellet, lo que la asociación achaca a dos motivos principales. El primero, que la mayoría de las comunidades autónomas no incentivan la puesta en marcha de este tipo de instalaciones, y el segundo que en este momento el petróleo se encuentra más bajo que su coste habitual. Pardo afirmó que es cierto que en el momento de la inversión, el coste de la instalación de calderas de biomasa o fósiles puede ser algo superior «aunque se amortiza a corto plazo»,. En este sentido, recalcó la existencia de muchos casos en stand-by, especialmente en el sector industrial y agroindustrial, debido principalmente a los dos factores antes mencionados.

Esta opinión es compartida por Juan Tapia, presidente de Naturpellet, industria que fabrica pellets en la vecina localidad de Sanchonuño y que ayer ejerció de anfitriona de la asamblea, que comenzó a primera hora de la mañana con una visita a las instalaciones, para pasar seguidamente a la reunión de los socios de la agrupación.

A su juicio, el bajo consumo existente en general en el país y el frenazo que ha habido, sobre todo en instalaciones, puede deberse en parte a que el actual Gobierno de la nación «no está actuando adecuadamente fomentando la utilización de este tipo de combustible, como es el pellet, que prácticamente sus emisiones de CO2 son cero, y por otro lado, sin querer, está fomentando el consumo de gasóleo, con unas emisiones de CO2 alarmantes», apuntó.

Por ello, según explicó, uno de los objetivos de la asociación es despertar el interés y sensibilizar a las administraciones autonómicas y al Estado para que España se sitúe al nivel de otros países de la Comunidad Europea, como por ejemplo Italia, con la ventaja de que en este país somos productores, mientras que los italianos exportan. «En España producimos pellets con materias primas españolas y se genera riqueza en todo el país», destacó Tapia.

Ese también es el caso de Segovia, una provincia eminentemente forestal, con una amplia superficie arbórea, en la que es lógica la existencia de al menos una fábrica de pellets que pueda utilizar esos recursos para reducir el coste de los usuarios de energía, en este caso transformada a través de pellets. Naturpellet fabrica en torno a 40.000 toneladas al año, una producción de una planta media, pues en España existen fábricas que incluso doblan esa cantidad. De las empresas agrupadas en Apropellets, la situada en Sanchonuño se encuentra en tercer lugar en cuanto a la producción anual. Castilla y León lidera el sector en España y también la representación territorial en la asociación, con cinco empresas agrupadas.

En opinión de Tapia, no existe buena información, tanto desde el punto de vista medioambiental como del económico. «El ahorro del pellet con respecto al gasóleo es de casi el 50%. Lo saben determinadas pequeñas economías o consumos domésticos, pero no está habiendo una campaña importante a nivel nacional, que es la que hoy vamos a tratar de abrir, sensibilizando a las administraciones para que se reduzcan las emisiones y los consumidores ahorren dinero utilizando pellets».

Hacia la excelencia

Uno de los temas que se abordó fue la búsqueda de la excelencia en la calidad. Todos los asociados de Apropellets se encuentran certificados en distintas normas de calidad, aunque quieren avanzar en este sentido y tener un producto que se acerque más a la excelencia, según destacó la presidenta Luz Pardo. «Aquellos parámetros que son más sensibles y más importantes en el pellet, los trataremos de mejorar en cuanto a lo que exige la certificación», explicó.

España tiene una capacidad de producción superior a 1,3 millones de toneladas anuales, pero los datos de producción real apenas sobrepasan un tercio de esta cifra, situándose en 475.000 toneladas. Apropellets y sus catorce socios cuentan con una producción superior a las 230.000 toneladas y una capacidad nominal de 420.000. El colectivo genera más de 5.000 empleos directos vinculados a los combustibles sólidos.