«Muchas veces comemos más cantidad de la que necesita nuestro organismo»

La Fundación Caja Rural y el restaurante Cucharrena de Segovia impulsan el primer Foro Abierto de Salud y Gastronomía, que anoche vivió una nueva sesión abierta al público. La doctora Cristina Abreu aderezó el encuentro con un menú de reflexiones en pequeñas cantidades pero certeras para saciar el hambre de conocimiento de los asistentes. Especialista en Endocrinología y Nutrición, emplató unos consejos para llevar una vida más saludable desde los hábitos alimenticios y la práctica del ejercicio. Y dado que las cocinas son las protagonistas, la doctora de origen canario maridó los factores de riesgo de patologías como la diabetes mellitus de tipo 2.

El sobrepeso o la obesidad, el colesterol o la hipertensión arterial se mezclan en una peligrosa ensalada para la salud. Y una preocupación que se convierte en advertencia en palabras de Cristina Abreu: el aumento de la prevalencia de la obesidad en la población infantil, y no precisamente solo en los países más desarrollados.

Para abrir boca, y en líneas generales ¿nos alimentamos bien los españoles?  

En general, creo que hemos mejorado la forma de alimentarnos en los últimos años. Según el Informe de Consumo de Alimentación publicado recientemente por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, el 44,8% del total consumido en alimentación en España se sustenta en productos frescos; el 62,2 % de las comidas realizadas en el hogar constan de un plato único, y habitualmente la dieta es más equilibrada y las técnicas culinarias a la hora de preparar la comida han mejorado con respecto al año 2011. Otro aspecto a tener en cuenta es que muchas veces comemos más cantidad de la que realmente necesita nuestro organismo

Imagino que también habrá diferencias en función de la geografía y de las despensas. 

Es cierto. Al igual que vemos diferencias en la prevalencia de obesidad según la zona geográfica. Estas diferencias coinciden con las diferencias encontradas en el gasto per cápita en alimentación y con las diferencias en los hábitos de alimentación o en técnicas culinarias.

Proporciones epidémicas

La Organización Mundial de la Salud (OMS) advierte de que la obesidad es la epidemia del siglo XXI. ¿De verdad es para tanto?

Según la OMS, la obesidad ha alcanzado proporciones epidémicas a nivel mundial; y cada año mueren, como mínimo, 2,8 millones de personas a causa de la obesidad o sobrepeso. Aunque anteriormente se consideraba un problema confinado a los países de altos ingresos, en la actualidad la obesidad también es prevalente en los países de ingresos bajos y medianos. Sobre todo, es preocupante en la población infantil. En el año 2013, 42 millones de niños menores de cinco años tenían sobrepeso. Por este motivo, es fundamental que desde las instituciones sanitarias promovamos actividades preventivas y motivemos para la realización de ejercicio físico.

¿Cuál es la relación entre la obesidad y el sobrepeso con la apnea del sueño?

El exceso de peso se asocia con múltiples enfermedades como la diabetes mellitus tipo 2, la hipertensión arterial y otra muy importante es la apnea del sueño. La persona con apnea del sueño hace pausas en la respiración o tiene respiraciones superficiales durante el sueño, el sueño es de mala calidad y se siente cansado durante el día. La apnea del sueño es una de las principales razones por las cuales una persona puede sentir mucho sueño durante el día. Si no se trata, es un factor de riesgo para a hipertensión arterial, la diabetes mellitus o el padecimiento de arritmias cardiacas, por citar solo algunos ejemplos.

Déme algunos breves consejos culinarios con los que va a aliñar su conferencia. 

Comer sano y equilibrado no es sinónimo de comidas aburridas y monótonas. Las recetas pueden ser muy variadas y con un gran valor nutricional y culinario. Es importante que la presentación entusiasme al comensal. Este aspecto especialmente importante para abordar la obesidad infantil. También es recomendable que se realicen tres tomas principales de comida, que serían desayuno, comida y cena, y dos pequeñas tomas a media mañana y media tarde.

En una vida que pasa a toda prisa, la alimentación se resiente. ¿Es tan importante el desayuno como lo pintan?

El desayuno es fundamental y recomiendo que contenga un lácteo,  fruta y entre treinta y cincuenta gramos de cereales, que puede ser pan, galletas o los propios cereales. Luego, en la comida y en la cena debemos procurar que el plato incluya verdura; una pequeña porción de  hidratos de carbono, ya sea pasta, arroz, patata, etcétera, y alimentos ricos en proteínas, como la carne, el pescado o el huevo.