Solo uno de cada cuatro niños tutelados en España vive en familias de acogida

El catedrático de Psicología Evolutiva y de la Educación en la Universidad de Sevilla, Jesús Palacios, asevera que «en los centros, los niños se vuelven invisibles; y en ellos pueden pasar muchos años de su infancia y adolescencia. Y cuanto más tiempo pasan en ellos, menos fácil es encontrarles una alternativa familiar y más daño acumulan. Por desgracia, son muchos los que entran de pequeñitos y permanecen luego institucionalizados durante una buena parte de su infancia, si no más».

Esta reflexión le ha valido a a Asociación Estatal de Acogimiento Familiar para reivindicar que se cumpla la ley vigente y los derechos fundamentales de la infancia, que entre otros reconocimientos le otorga a los menores le derecho a vivir en una familia, recuerda el portavoz de la Asociación de Familias de Acogida de Segovia (Afasego). Juan María Galán indica que en España hay contabilizados alrededor de 15.000 niños que viven en centros de la Administración bajo un régimen de tutela institucionalizada.

La legislación sobre los derechos de los menores, que ha tardado más de cuatro años en elaborarse, entró en vigor el pasado es de agosto. Sin embargo, «no se ha hecho nada», lamenta el representante segoviano. Entre otras prioridades para poder desarrollar y aplicar la ley, reclama una dotación presupuestaria para poner en marcha la maquinaria y empezar a captar familias que estén dispuestas a acoger en su seno a estos menores. Son niños que, por desgracia, han sido maltratados, abandonados o simplemente sus padres biológicos carecen de recursos para hacerse cargo de ellos. La protección que ha de ejercer el Estado y sus instituciones implica en algunos casos separarles de su familia durante un tiempo o para siempre.

En 2008, último año del que se conocen datos oficiales, unos 11.000 niños entraron en instituciones para su amparo, mientras que alrededor de 4.000 pasaron a una situación de acogimiento familiar o adopción nacional. El representante de la asociación segoviana llama la atención de que únicamente el 25% de los cerca de 15.000 niños que están tutelados por la Administración vive en un hogar. El resto se encuentran en centros, con el riesgo que corren a tenor de las palabras del catedrático de la Universidad de Sevilla.

Cupo de urgencia

Galán también pone en evidencia que la norma sobre los derechos infantiles no solo no se ha puesto en marcha, sino que además se está incumpliendo. En concreto, pone de manifiesto que la legislación no permite que los menores de tres años se hallen institucionalizados en centros. Además, esas misma legislación recomienda que tampoco estén en ese régimen los menores de seis años de edad. El incumplimiento es generalizado en todas las comunidades, incluida Castilla y León, apostilla el portavoz segoviano.

En la actualidad, la asociación provincial registra una veintena de familias de acogimiento que se ocupan de doce niños. Es decir, que hay ocho hogares dispuestos a incorporar a menores que estén en desamparo. Juan María Galán deduce que esta oferta por encima de la demanda podría servir perfectamente para cubrir el cupo de las llamadas «familias de urgencia», núcleos que podrían abrir sus puertas a menores «para que no estén ni un minuto en un centro». Incluso también lo rebasaría, ya que calcula que «con cuatro o cinco sería suficiente».

Galán concluye con la petición a la Administración de que «se ponga las pilas y busque familias». Además, considera necesario que se unifiquen los criterios y ayudas al acogimiento en todos los territorios.