El Sinodal de Aguilafuente inspira una novela

Con la presencia de su autor, Bernabé García y en un salón de actos del Ayuntamiento abarrotado de vecinos, la localidad de Aguilafuente ha acogido la presentación de la novela titulada 'El precio de la ambición', cuyo protagonista es el Sinodal de Aguilafuente, primer libro impreso en España

Tras una breve introducción biográfica y sobre la obra a cargo del presidente de la Asociación Sinodal de Aguilafuente, Fermín de los Reyes, el autor explicó que se enamoró del Sinodal en una visita a la Catedral en el año 1997, y que a partir de entonces pensó en escribir una novela que tuviera este como protagonista. La acción transcurre en 1621, periodo de decadencia, de validos y de abusos del poder. «Sin el Sinodal no podría existir la novela, pues su robo de la Catedral es el origen y el fin de toda la trama», afirmó el autor ante un expectante público. Según confesó, «nunca pensé que presentaría el libro precisamente en Aguilafuente, lugar donde tuvo lugar el sínodo que dio origen al libro». El acto concluyó con la lectura de un fragmento de la novela.

Al finalizar el acto, Bernabé García firmó numerosos ejemplares de la novela que, cuya trama transcurre entre Madrid y las tierras segovianas. La presentación fue el preludio de las inminentes jornadas sobre el Sinodal, que tendrán lugar el próximo fin de semana en Aguilafuente.

Por primera vez en la capital

Cada mes de agosto desde hace más de diez años los vecinos de Aguilafuente escenifican aquel episodio histórico con festejos que evocan la llegada de la modernidad al país. El libro, que data de 1472, recoge las actas del Sínodo diocesano celebrado en la villa segoviana en los primeros días de junio de ese año. El obispo de Segovia, Juan Arias Dávila, encargó que los textos fueran multiplicados con la imprenta, lo que permitió que esta tecnología llegara a Segovia antes que a ciudades más desarrolladas e importantes de la época.

Este año, la Asociación encargada de difundir la relevancia histórica de este acontecimiento trasladó por primera vez los espectáculos a las calles de Segovia para que los vecinos de la capital, en cuyo Archivo Catedralicio se custodia el único ejemplar del Sinodal, también adquieran conciencia de la revolución que supuso la introducción de la imprenta a través de Segovia.