Salamanca vuelve a crear empleo tras un trimestre destruyéndolo

La comparación con hace un año es llamativa, por buena: hay 2.375 parados menos (un 9,2% menos). Aún estamos por debajo de la media regional, que roza el 10%, pero teniendo en cuenta la debilidad del mercado laboral salmantino, tan dependiente del sector servicios, es para estar medianamente satisfechos.

Por sectores, los servicios y la industria tiraron del carro. También hay que destacar los 28 empleos generados entre personas que nunca habían tenido un trabajo anterior. El paro creció sobre todo en la agricultura y, en menor medida, en la construcción.

Históricamente, noviembre es un mes átono, sin grande variaciones para bien ni para mal. Es de prever que la situación sea mucho mejor en diciembre, mes de contratos navideños, sustituciones por vacaciones y refuerzo de plantillas ante el incremento en el consumo.

Las opiniones sobre lo sucedido son las que cabría esperar tanto en sindicatos como en patronales.

En CC OO afirman que noviembre deja «ínfimos resultados positivos en el contexto laboral de nuestra provincia», pero «significativo en cuanto al descenso de personas en desempleo desde el año 2015 en este mismo mes». La central, que también advierte sobre la reducción «significativa» en el número de contratos firmados (un 26% menos que en octubre), afirma que queda sólo un mes para terminar un 2018 «convulso en lo político y premonitorio en lo que se puede avecinar para el próximo 2019, con los procesos electorales que están por llegar». Las «permanentes declaraciones de buenas intenciones por parte del nuevo gobierno socialista» se quedan en «gestos» sin «apenas cambios en lo necesario». La «incertidumbre económica» y la falta de presupuestos «limitan gravemente la posibilidad de establecer nuevos modelos de financiación social y activación de la economía».

En opinión de los responsables de UGT «entendemos que esta pequeña bonanza en el empleo se debe a la estacionalidad, que ha destruido empleo en la construcción y agricultura al finalizar la campaña de verano y ha favorecido la creación de empleo en el resto de sectores, encabezándola un sector muy feminizado como es el sector servicios, de ahí el empleo en la mujer». Por otro lado, echan de menos más contratación en el sector servicios «que entra en sus fechas claves, navidades y reyes. También es verdad que las compras a través de las plataformas digitales, pueden perjudicar el empleo en el comercio físico». Finalmente, apuntan que «la precariedad existente en Salamanca, nos hace reivindicar la total prioridad de las políticas hacia las personas, dirigidas a la creación de empleo estable y medidas sociales de protección que las ampare, sobre todo a los más desfavorecidos».

La Confederación de Organizaciones de Empresarios de Salamanca, por su parte, «advierte de la importancia de contar con una política clara y orientada definitivamente hacia la productividad y competitividad de las empresas, verdaderas generadoras de empleo». El «clima de incertidumbre del actual panorama político no apoya la puesta en marcha de una política económica estable, necesaria para seguir avanzando en materia de empleo».

Ante el actual contexto político y económico, Confaes «considera esencial el diálogo social» y reclama «reformas estructurales que ayuden a las empresas a reforzar su capacidad y, con ella, a la creación de empleo».

Finalmente, la Confederación de Empresarios de Salamanca (CES) aprecia los datos positivos «a pesar de que el número de contratos realizados ha disminuido respecto al mes de octubre. Se trata de unos números mínimos aunque cabe destacar que noviembre es el primer mes en el que se produce una bajada en estas cifras tras varios aumentos consecutivos».

El Presidente de CES, José Vicente Martín Galeano, apunta que «el empleo está creciendo poco a poco pero necesitamos nuevas medidas que incentiven la contratación». «La lectura en términos anuales es positiva con un destacado protagonismo de la actividad empresarial en el mercado durante el último año».