Al Salamanca UDS se le hace demasiado largo el duelo de Pasarón (2-0)

La tercera derrota consecutiva del Salamanca UDS se produjo ante el nuevo líder del Subgrupo 1A, el Pontevedra, con dos tantos recibidos al límite del tiempo reglamentario (2-0). Influyó notablemente la expulsión de Delorenzi a falta de más de media hora para la conclusión. Un penalti cometido por el portero Barbero, héroe de su equipo hasta ese momento, permitió a Charles abrir la cuenta en el último minuto del tiempo reglamentario. Dos minutos después, en el 92, Rufo puso la puntilla al contragolpe de fuerte tiro cruzado. Los visitantes, que ya son penúltimos con solo 3 puntos de 15 posibles, se cargaron de tarjetas amarillas y de una roja directa.

El Salamanca UDS tuvo las ideas claras desde el principio, haciendo gala de un orden defensivo muy alto en su línea de cinco efectivos, como ya sucedió en la primera jornada ante el Deportivo de La Coruña en Riazar. Pese a ello, tanto Rufo como Xisco Campos dispusieron de sendas oportunidades en sus cabezas mediado el primer acto. El propio Rufo pudo abrir el marcador en una buena oportunidad dentro del área, la única de la primera parte en la que el Pontevedra logró pisar el área con el balón controlado, pero Barbero estuvo muy atento para echarse encima de él.

Los pupilos de Sergio Egea, que puede ver peligrar su puesto tras esta nueva derrota, estuvieron prácticamente inéditos en ataque durante el primer período. Un disparo desviado de Llorente desde fuera del área fue lo más destacado para los visitantes, que no mostraron ningún plan de actuación para hacer daño. Egea introdujo el primer cambio al descanso dando entrada a Mora en sustitución de un revolucionado Lacerda, que pudo ser expulsado por una innecesaria entrada a Charles cuando la jugada ya había quedado invalidada.

La roja

El partido dio un giro radical cerca de cumplirse la hora de juego. Las cosas se le pusieron realmente complicadas al Salamanca cuando Delorenzi vio la tarjeta roja directa al verse obligado a sujetar a Charles en una ocasión manifiesta de gol. A partir de ese momento, se desató el chaparrón del Pontevedra, ilusionado con acceder al liderato. Álex González, desde fuera del área, y Rufo avisaron para lucimiento del portero Barbero. Jesús Ramos, entrenador del Pontevedra, arriesgó con los cambios al meter a dos hombres de perfil ofensivo, Oier Calvillo y Romay, en sustitución de los dos laterales, Aitor Núñez y Zabaleta, para poner más dinamita arriba. La estrategia le salió muy bien al Pontevedra, que siguió con su asedio y perdonó hasta en tres oportunidades más con Charles, Xisco Campos y el canterano Iñaki como respectivos protagonistas ante Barbero. El duelo se decidió al contragolpe, a raíz de un penalti de Barbero al llegar tarde a un mano a mano frente a Rufo, al que atropelló con claridad. Charles asumió los galones y engañó al portero del Salamanca desde el punto fatídico en el minuto 90, el último del tiempo reglamentario. Dos minutos después, también en velocidad, Rufo sentenció a pase de Charles de fuerte tiro cruzado.