Secciones
Servicios
Destacamos
RICARDO RÁBADE / WORD
SALAMANCA
Lunes, 5 de agosto 2019, 11:44
Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.
Compartir
El pleno municipal pierde competencias y las gana de forma palpable la Junta de Gobierno Local. Ésta es la principal conclusión que se desprende de estos casi dos primeros meses de la nueva legislatura en el Ayuntamiento de Salamanca. Se trata de una tendencia que difiere totalmente de la tónica generalizada a lo largo del pasado mandato 2015-2019, cuando el Pleno asumió un amplio elenco de competencias que no solo se limitaban a la habitual aprobación de mociones, sino a la licitación y adjudicación de contratos, muchos de ellos presupuestados con cuantías millonarias.
Una buena prueba de lo enunciado anteriormente es lo que sucedió el pasado 26 de julio. Ese día se reunieron tanto la Junta de Gobierno Local como el pleno del Ayuntamiento. La Junta de Gobierno Local ha dejado de contar con representación de las fuerzas políticas de la oposición, tal y como vino ocurriendo a lo largo de los últimos cuatro años, quedando integrada solo por concejales del Gobierno bipartito, concretamente siete ediles del PP y tres de Ciudadanos.
Ese día la sesión del pleno municipal consistió, fundamentalmente, en debatir y aprobar varias mociones de los grupos municipales, como sucedió, por ejemplo, con la moción que abanderó Ciudadanos y que concitó el respaldo del PP, que fue finalmente ratificada y en cuyo texto se condenaban sin paliativos los insultos que sufrieron el pasado 9 de julio dirigentes de la formación naranja durante la celebración de la movilización del Orgullo LGTBI en Madrid. Al margen de ello, el orden del día de la sesión plenaria estuvo integrado por asuntos de marcado carácter de trámite que apenas generaron debates. Únicamente el punto relativo al plan para desbloquear e impulsar el proyecto del Puerto Seco y la cesión de suelo a precios asequible para facilitar la instalación de empresas en la zona de Peña Alta elevaron el tono de las opiniones enfrentadas que verbalizaron, por un lado, el PP y Ciudadanos y, por otro, el PSOE y el Grupo Mixto, concretamente Ganemos a través de su edil Virginia Carrera.
En cambio, en la reunión que mantuvo ese mismo día, 26 de julio, la Junta de Gobierno Local se adoptaron acuerdos de calado sobre las contrataciones municipales. PP y Cs aprobaron la modificación del contrato para la realización de los trabajos de conservación, mantenimiento y mejora de los jardines y espacios verdes municipales de Salamanca para prolongar su vigencia, dando continuidad a este servicio público hasta la formalización del nuevo contrato. También se aprobó, dentro del capítulo de las contrataciones, el pliego de cláusulas administrativas particulares y de prescripciones técnicas y del gasto de los trabajos de limpieza de los espacios municipales dentro de un proceso de inserción social, además de ordenarse la anulación parcial y el compromiso de gasto en el acuerdo de adjudicación del servicio de gestión y ampliación del sistema de préstamo de bicicletas 'Salenbici'.
Ni uno de estos tres contratos fue debatido en el pleno municipal de ese día, si bien es cierto que dichos contratos fueron analizados días atrás por la Comisión de Bienes y Contratación, donde la oposición sí dispone de representantes.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.