Un libro analiza la huella de Salamanca en la pintura costumbrista

El libro se centra en la década final del siglo XIX y en los inicios de la siguiente centuria, una época en la que fueron muchos los pintores que se acercaron hasta Salamanca con la intención de plasmar en sus lienzos tipos y costumbres de la tierra, lo que ha permitiro pervivir en las obras huellas como la del traje charro.

De entre todos ellos, el autor centró su análisis en trece artistas de fama internacional. Concretamente, se trata de Francisco Iturrino, Darío de Regoyos, Cecilio Plá Gallardo, Manuel Benedito, Valentín y Ramón Zubiaurre, Carlos Vázquez Úbeda y Joaquín Sorolla.

La investigación se aborda desde una perspectiva histórica. Por esta razón, el marco temporal elegido se circunscribe a una etapa histórica: la Restauración Monárquica, periodo que abarca desde 1874 a 1931, momento en que comenzó la Segunda República.

Sobre este etapa y los pintores elegidos, el investigador se centró en sus biografías, en sus visitas a Salamanca, en las obras que realizaron con presencia de signos charros e, incluso, ha analizado noticias de la época o correspondencia que mantuvieron con otras personalidades de la época relacionadas con la provincia.

«Esta publicación ha sido posible gracias al convenio de colaboración que mantenemos con el CES y que tiene como finalidad la coedición de publicaciones que traten sobre la historia y la tradición salmantinas en todos sus aspectos», apuntó. «Gracias al trabajo desinteresado de los miembros del Centro de Estudios Salmantinos contamos con una importante colección de publicación, en continuo crecimiento, relacionadas con Salamanca en todos los campos del conocimiento», añadió, recoge E. Press.

Miguel García-Figuerola es licenciado en Geografía e Historia y Filología Hispánica y doctor en Arqueología, por la Universidad de Salamanca. Ha sido profesor en las universidades de Salamanca y León, en las que ha impartido docencia en distintas asignaturas de Arqueología, Numismática, Historia e Historia del Arte.