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Esther González (Reina Sofía), Carmen Calvo (Ariadna), Patricia Gálvez (Aspace) y Cristina Díaz (Aerscyl). WORD
Las familias salmantinas califican de «tomadura de pelo» el proyecto de ley para la Educación Especial

Las familias salmantinas califican de «tomadura de pelo» el proyecto de ley para la Educación Especial

Exigen al Gobierno que abandone su idea de trasladar alumnos con discapacidades a centros ordinarios en aras de su «inclusión»

Daniel Bajo peña / word

SALAMANCA

Sábado, 23 de febrero 2019, 12:01

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Las familias de niños con necesidades especiales se han levantado en pie de guerra contra el Gobierno central y las administraciones educativas. El proyecto de reforma de la Ley Orgánica de Educación prevé integrar a dichos alumnos en centros ordinarios supuestamente dotados «con los recursos necesarios para poder atender en las mejores condiciones al alumnado con discapacidad». En la práctica, afirman desde varias asociaciones salmantinas, esta medida supondría la eliminación paulatina de los colegios de educación especial en aras de una presunta «inclusión» de sus alumnos.

Representantes de la Asociación Ariadna (autismo), Aerscyl (enfermedades raras), AMPA El Camino-Aspace (parálisis cerebral) y AMPA CEE Reina Sofía, integradas a su vez en la plataforma 'Educación Inclusiva Sí, Especial También' comparecieron ayer para mostrar su oposición frontal a la medida planteada por el Gobierno y para advertirle que «si tocan la Educación Especial nos tendrán de frente y en la calle, y al lado si apuestan por la inclusión». Según sus estimaciones, hay unos 1.300 alumnos de educación especial en Castilla y León y en torno a unos 160 en Salamanca.

Obstáculos

El proyecto de ley está paralizado por la convocatoria de elecciones, pero las asociaciones ya han anunciado que hoy participarán en manifestación en Valladolid. Ayer tildaron la propuesta de «globo sonda» inspirado por el «buenismo» e inmediatamente expusieron los numerosos obstáculos que tendría que salvar la ley para ser mínimamente útil.

«¿Se ha preguntado a los profesores de colegios ordinarios si pueden hacerse cargo de niños con pluridiscapacidad? ¿Qué pasará si tienen una broncoaspiración cada 30 minutos o un ataque de epilepsia cada 15?», se preguntaba una de las compareciente. «¿Y qué pasa con las edades? ¿Van a meter a un niño de 15 años o de 6 o de 8 que necesita educación especial con chicos de su edad? ¿Qué van a hacer los profesores? ¿Enseñar logaritmos a unos y a sumar 1+1 a otros?». En Educación Especial se dividen en función de la capacidad intelectual y «también enseñan a socializar», destacaron, aunque compartan las aulas entre niños de diferentes edades.

En cuanto a la posible dotación de recursos para adaptar los centros ordinarios a las necesidades de los alumnos, ironizaron con que «cuesta Dios y ayuda que haya una enfermera» en los colegios «y ahora dicen que lo van a adaptar todo» y a dotarlos con las prestaciones necesarias (médico, enfermera, terapeutas y cuidadores). Recordaron que, mientras hay una carencia de intérpretes de lengua de signos, a la vez «prometen que van a dar fondos para adaptar todos los colegios» del país. Las asociaciones reiteraron que el proyecto «es una utopía» y «una tomadura de pelo» y exigieron a las administraciones educativas «que bajen al suelo».

Los centros de Educación Especial, según el proyecto de ley, se convertirían en «centros de recursos». Ahora bien «ni ellos (los legisladores) saben qué son los centros de recursos». Desde las asociaciones de familiares comentan que cada vez que han preguntado por esta cuestión les han dado una respuesta diferente.

Finalmente, concluyeron planteándose «por qué algo que funciona se quiere eliminar» y pidiendo que se dote a los centros educativos especiales de más recursos para mejorar su funcionamiento.

Origen

La raíz de esta posible modificación legal está en un informe de la ONU publicado el pasado verano que sostenía que el sistema educativo español «excluye» a los alumnos con discapacidad dentro del sistema ordinario y a través de la Educación Especial. El presidente de la plataforma convocante, José María Escudero, afirmaba ayer que este texto ofrece una visión «totalmente sesgada» del sistema educativo español y asegura que ninguno de los autores del documento visitó un centro de Educación Especial.

Además, niega que haya dos sistemas paralelos, sino «un único sistema» donde los alumnos con necesidades educativas especiales «son atendidos bajo diversas modalidades de escolarización», recoge E. Press. Las representantes salmantinas de la plataforma 'Educación Inclusiva Sí, Especial También' coincidieron ayer en que los autores del estudio «no han visto nunca un centro de educación especial» y les invitaron «primero a que lo conozcan» antes de emitir recomendaciones sobre la educación en España.

El Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI), por su parte, ha respaldado la propuesta del Gobierno, algo que ha sorprendido a las asociaciones salmantinas, que esperan que «rectifique» y se desmarque de las intenciones del Ejecutivo. Sin embargo, advirtieron que es una entidad «muy poderosa» y que «no se va a apear» tan fácilmente.

La Plataforma Educación Inclusiva Sí, Especial También cree que los representantes políticos se han visto «sorprendidos» con la respuesta ciudadana y que por eso han reculado. «No les conviene tener a un montón de familias en la calle protestando», aunque temen que después de las elecciones puedan volver a las andadas. Por lo pronto, más de un centenar de asociaciones y 244.000 particulares han rubricado un manifiesto contra la «reorientación» de los centros educativos de educación especial. Ayer mismo le entregaron en mano una copia a la subdelegada del Gobierno en Salamanca.

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