La convivencia vecinal con los inmigrantes es «muy buena» en Salamanca

Klimowitz comentó que «entre el 5% y el 6%» de la población de Salamanca es de origen inmigrante. En 2007 y 2008 «hubo un repunte muy alto», pero muchos de ellos se marcharon durante los peores años de la crisis. El porcentaje «se ha estabilizado» y los niveles de convivencia son «muy buenos». «Están asentados en los barrios, son vecinos de la ciudad... la mayoría llevan aquí muchos años, aunque siguen llegando nuevos». Pese a todo, «no nos damos por satisfechos, sino que seguimos trabajando para mejorar» la convivencia.

El Ayuntamiento, explicó la concejala, actúa «siempre desde la óptica de la acogida y la tolerancia, trabajando desde la base, con las edades más tempranas, con los talleres de derechos humanos, desde la interculturalidad... para que los vecinos comprendan la pérdida que sufren los inmigrantes cuando deben salir de su país y para que los inmigrantes den el paso de sentirse parte de la sociedad», añadió. Entre los programas municipales destacan proyectos de educación en la escuela y talleres de «conocimiento mutuo» para «que se conozcan y se respeten las tradiciones de otras culturas y que formen parte de nuestra sociedad. Hay que hacer un esfuerzo para comprender y favorecer la convivencia basada en el respeto, la tolerancia y la comprensión entre todas las partes». Klimowitz destacó la relevancia del trabajo con los escolares porque la coexistencia entre todos «es algo que se comprende y se respeta desde pequeños».

La inmigración «es una oportunidad para el desarrollo social, económico y poblacional de Salamanca» y «por eso colaboramos con asociaciones como Cepaim». La presentación de la campaña de ésta, llamada 'Quiero verte', atrajo a un buen número de profesionales de ONG y entidades benéficas.