Condenado a tres años y cuatro meses de cárcel por abusar sexualmente de su sobrina en Salamanca

Los hechos objeto de delito comenzaron en 2002, cuando el condenado abusó sexualmente de una de sus sobrinas, nacida en 1996, en el garaje de este. Allí, según la sentencia, «se bajó la cremallera de los pantalones y le dijo a la menor que le masturbara, pero al no reaccionar la menor, el acusado cogió la mano de su sobrina y la llevó hasta el pene». Mas tarde, entre 2002 y 2012, y en el mismo domicilio, en un localidad de Salamanca cercana a la en el que A. G. M. trabajaba en la agricultura, realizó tocamientos a la misma sobrina por encima de la ropa y cuando esta se encontraba en el comedor de la vivienda, utilizando las faldillas de la mesa para taparse, como indica la sentencia.

Además, en el 2012, cuando esta sobrina tenía 16 años, el condenado entró en el salón de la vivienda, donde estaba con sus amigas, y se masturbó delante de ella. Una situación similar ocurrió ese mismo año, cuando el condenado se acercó al vehículo del padre de su sobrina, que estaba con una amiga, y se masturbó. Además, según recoge la sentencia, en la denuncia de 2016 también se indicaba que el condenado habría abusado sexualmente de otra sobrina, hermana de la anterior, en este caso nacida en 1983, pero en este caso los hechos ya habían prescrito.

En su defensa, el condenado aseguró que por aquella época «trabajaba de sol a sol» y que, aunque sus sobrinas acudían con frecuencia a la vivienda en la que se produjeron los hechos, él tenía una relación normal con ellas. No obstante, los hechos resultados probados puesto que las fincas en las que decía estar trabajando el condenado estaban cerca de la localidad en la que se llevaron a cabo los delitos. De hecho, uno de los empleadores del condenado confirmó que no estaba constantemente en la finca.