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Varios de los cabezudos a su salida de La Alamedilla. WORD
Los cabezudos cumplen con la tradición de más de medio siglo

Los cabezudos cumplen con la tradición de más de medio siglo

El público demanda más días en el programa de fiestas y que puedan hacer un recorrido hasta el centro de la capital

EVA CAÑAS / WORD

SALAMANCA

Lunes, 10 de septiembre 2018, 11:30

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A los cabezudos de Salamanca, como 'El Padre Putas', 'El Charro', 'La Naranjita' o 'El Payaso' les gustaría salir a la calle más días dentro de las Ferias y Fiestas de la Virgen de la Vega. Lo habitual son tres jornadas, pero su público fiel demanda más, sobre todo los más pequeños, aunque sus padres también recuerdan en su infancia que estaban más presentes estos días.

Otro deseo es poder ir por las calles del centro, como se puede ver en las fotos en blanco y negro de Gombau, cuando estos cabezudos corrían por la Plaza Mayor, la calle Toro, la plaza de Anaya o en Compañía. Este año han sido restaurados, tanto sus cabezas (algunas muy deterioradas) como sus trajes, que según su responsable, José Luis Pérez, «se les ha dado un carácter más actual, con colores y expresiones más vivos», y añadió que ya habían pasado 20 años de la última restauración.

Los 14 cabezudos hacen un recorrido entre el parque de La Alamedilla y Jesuitas, acompañados de una charanga, y entre ellos están los personajes más propios de la tierra, como 'El Padre Putas', 'Julián Sánchez El Charro', 'La Naranjita', 'La Celestina' o la pareja de charros, que junto a 'El Alcalde' suponen una cita obligada para muchas familias en los tres primeros días de las Ferias y Fiestas. Es el caso de Pablo Ortiz y Paula Rodero, de 5 y 8 años, fieles a esta cita y a correr delante de ellos. Sus favoritos son 'El Payaso' y 'Napoleón', que en realidad es 'Sancho Panza', y viven la ilusión de los cabezudos como si se tratase de los Reyes Magos.

El papel de estos personajes los encarnan cofrades de la ciudad, y este año, por primera vez, entre ellos había una mujer. Según les consta, ya data la tradición de hace más de 45 años, y su idea es «mantenerlo y potenciarlo», porque forma parte de la historia de la ciudad.

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