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El responsable de Protección Civil de Santa Marta, Álvaro Alaguero (derecha). LAYA
Coronavirus en Salamanca: Álvaro Alaguero: «Intentamos llegar al máximo de gente posible»

Álvaro Alaguero: «Intentamos llegar al máximo de gente posible»

SANTA MARTA DE TORMES ·

El reponsable de Protección Civil en Santa Marta explica cómo la agrupación reparte kits de emergencia, recoge material sanitario y llega a atender hasta cien llamadas al día

MANUEL LAYA / WORD

Domingo, 29 de marzo 2020, 14:34

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Álvaro Alaguero, responsable de Protección Civil de Santa Marta de Tormes, coordina y dirige estas semanas una situación muy diferente a las vividas en sus 11 años como voluntario y 7 como responsable en la localidad tormesina. A su cargo 27 voluntarios que derrochan esfuerzos por hacer más llevadera esta pandemia de la localidad aportando sus conocimientos y facilitando la labor a otros colectivos que estos días no dan abasto. La agrupación sigue pidiendo que la gente les ayude quedándose en casa y cumpliendo las normas de higiene que se han recomendado.

-¿Cuál es la labor de Protección Civil en Santa Marta estos días?

- Se está intensificando la realización de acciones sanitarias en apoyo con el Centro de Salud y servicio de emergencias sanitarias y también en acciones sociales con los vecinos de Santa Marta. Realizamos desde el cuidado de personas desfavorecidas por cuestiones de movilidad, salud,… Lo que hacemos es entregarles un kit de productos de primeras necesidades a estas personas con un alto factor de riesgo para intentar que no salgan a la calle. Y aprovechando esa visita de la entrega del kit se hace un chequeo de salud con los enfermeros que tenemos en la agrupación. Les hacen algunas preguntas sobre si tienen algún síntoma, si están bien, se les toma la temperatura… Un poco para controlar a estos vecinos y saber que siguen bien. En la primera semana de estado de alerta llegamos a 30 personas.

- ¿Cómo estáis de personal?

Tenemos dos enfermeros, nueve técnicos, algunos bomberos,… La labor de los voluntarios siempre depende del tiempo, dadas las circunstancias el tiempo es total así que hemos dividido el tiempo en tres turnos, mañana, tarde y noche, de forma que queden cubiertos de lunes a domingo. A día de hoy se están llenanod todos los turnos para cubrir todas las necesidades que nos están solicitando.

- ¿Cuál es la diferencia de volumen de trabajo en estas semanas con otra normal?

- Hemos pasado de tener una media de llamadas baja a llegar a tener algún día 113 llamadas. Muchas de ellas porque se impacientan llamando al teléfono que facilitó la Junta para consultas del coronavirus y al 112. Tenemos llamadas de todo tipo, desde gente que nos pregunta que tiene ciertos síntomas hasta otros que nos dicen que tienen mucho hidrogel, mascarillas y guantes y que les gustaría donarlos. También muchas llamadas de personas para decirnos que ven a gente paseando por la calle y entonces damos aviso a las autoridades para que actúen.

Aparte de las llamadas y el reparto de los kits de productos básicos estamos haciendo una recogida de dispensadores para poderlos llevar al centro de salud, los rellenaremos en la Facultad de Farmacia que está haciendo gel y los repartiremos por hospitales y centros de salud de toda la provincia. Ecotisa nos llama también para recoger las pantallas salpicadoras que están fabricando y que las acercamos al centro hospitalario. Además, un grupo de señoras del taller de costura del municipio, profesoras y alumnos, están realizando unas 150 mascarillas al día que se están recogiendo y llevando a las residencias y centros de salud. No podemos cubrir todo con los medios que tenemos, pero con la colaboración de todo el mundo estamos intentando llegar a la máxima gente posible que podemos.

- ¿Protección Civil sufre también el déficit de material de protección?

- La asociación tenía trajes de riesgo biológico en su día, desde gafas, pantallas, guantes,… Y sí es verdad que ha habido tantas visitas que se han ido gastando. Tenemos ahora mismo los trajes justos, cada visita que hace el técnico y el enfermero supone un gasto en material, cada vez que atienes a una persona en su domicilio como no sabes en qué estado se encuentra no puedes llevar esa mascarilla y guantes a otro domicilio y arriesgarte. Aunque nos informan si hay algún posible riesgo de que la persona que visitamos podría tener síntomas de coronavirus pero hay que extremar las precauciones. El boom primero de la enfermedad lo hemos cubierto muy bien protegidos porque teníamos material de sobra para actuar. Pasado este primer bache ahora estamos a expensas de que nos llegue más material para seguir trabajando.

- ¿Cómo se le podría pedir a un voluntario que no cobra que acuda sin protección?

- Lo primero que tenemos claro tanto el Ayuntamiento de Santa Marta como los responsables de la unidad es la seguridad del voluntario. Si no podemos ir a un sitio porque no hay seguridad para ese voluntario no se va a ir, no podemos poner en riesgo la vida de una persona por querer llegar a más.

- ¿Para qué hay que llamar a Protección Civil y para qué no hay que llamaros?

- Que nos llamen cuando no pueden contactar con los teléfonos habilitados por la Junta para la enfermedad, estén colapsados y noten que tengan síntomas de la enfermedad. Para cualquier incidencia sanitaria que tengan o algún problema como un incendio u otro percance. Nosotros estamos en contacto permanente con el 112, bomberos, Guardia Civil, Policía, etc. Nosotros igual podemos contactar más rápido con ellos e incluso en algunos casos poder actuar. No se debe utilizar este teléfono para preguntar si se puede o no salir a la calle y preguntas disparatadas, los teléfonos de emergencias son precisamente para emergencias. Los vecinos de la localidad pueden llamarnos cuando lo necesiten al 923 139 141 y les atenderemos lo mejor que podamos con mucho gusto.

- Supongo que al final del día uno se pregunta ¿vale la pena tanto esfuerzo?

- Sí, por supuesto. Nosotros percibimos el cariño de la gente y eso es lo que nos agrada e impulsa a seguir día a día luchando. Salimos como cada día a las ocho de la tarde y notamos ese cariño de la gente aplaudiendo, cada día pasamos por una zona distinta, y cuando ven las sirenas se notan como más aplausos, más fuerza y eso nos llega ese cariño. Salimos también a esa hora porque es quizá el momento en el que la gente cambia un poco el ámbito, sale un poco fuera de la rutina y parece como que te olvidas de la situación entre aplausos y los gritos de gracias de los niños. Una señora nos llamó una vez solo para darnos ánimos y decirnos que lo estábamos haciendo muy bien y que sin nosotros no sería posible

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