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Lunes, 13 de febrero 2017, 11:47
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Las obras para derribar el edificio del barrio Vidal que sufrió la explosión antes de Navidades comenzaron esta mañana.
El pasado 21 de diciembre se produjo una explosión de gas en el segundo piso de un inmueble de la calle Príncipe, que causó heridas a ocho personas. Como consecuencia de la explosión, el edificio fue declarado en ruina ya que la detonación afectó a la estructura.
En los últimos días, la Policía Local habí apostado ante el edificio una patrulla para evitar "pillaje y okupas" en las viviendas del inmueble, ya que se ha podido comprobar que ya se han llevado instalaciones de cobre, puertas, ventanas o enseres que quedaban en el interior de las viviendas desalojadas.
Tras la explisión algunas familias se realojaron en casas de familiares y otras fueron alojadas en el albuergue juvenil Lazarillo de Tormes mientras el Ayuntamiento que ya ha ofrecido alguna vivienda a los afectados, buscaba una solución para ellos.
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