Tirón de orejas sindical a los partidos por su fracaso en la lucha social

«Aquí no mejora nada. No sabemos porqué pretenden engañarnos con datos y cifras que no demuestran nada, porque cada día que pasa, el empleo es más precario, hay más gente sin trabajo y cada vez hay más gente que no cobra nada». Así de tajantes fueron los responsables sindicales salmantinos poco antes de comenzar la manifestación organizada conjuntamente por CC OO y UGT, pero a la que sumaron numerosas organizaciones, y que bajo el lema Contra la pobreza salarial y social, trabajo y derechos congregó a alrededor de 1.000 personas 3.000 según los organizadores.

A pocas horas de la disolución de las cámaras en el Parlamento, tras el fracaso de todos los partidos que consiguieron representación en las lecciones generales del 20-D, y con unos nuevos comicios a la vuelta de la esquina, la política no podía faltar en una cita tan reivindicativa como la de ayer. Yprecisamente los política, todos prácticamente sin excepción, no salieron muy bien parados.

Los sindicatos, en palabras de Emilio Pérez, secretario general de CC OOen Salamanca, criticaron la actitud de la mayoría de los partidos durante estos cuatro meses «en los que se han preocupado más de sus propios intereses partidistas que de solucionar los problemas de lo españoles, que son muchos».

Especialmente crítico fue Emilio Pérez con los partidos progresistas o de izquierdas, «que por esos mimos interés no han sido capaces de ponerse de acuerdo para crear una alternativa que sacase a Rajoy y al PP y su nefasta política laboral del Gobierno de este país».

A propósito de las perspectivas políticas, los sindicatos aprovecharon la ocasión para mandar un mensaje a los partidos, recordándoles que tiene una nueva oportunidad el 26-J para dar una nueva imagen y subsanar su fracaso, consiguiendo formar un gobierno que garantice las medidas necesarias para que la situación de los trabajadores mejore de una vez y se pueda poner fin a la quiebra social que se vive en estos momentos.

Ese mensaje de unidad de acción fue el que marcó la manifestación de ayer, después de que el año pasado UGT y Comisiones se manifestaron por separado por un conflicto en sus secciones del Metal.

Los responsables de ambos sindicatos anunciaron ayer, que como hicieron al día siguiente del 1º de Mayo de 2015, hay que dejar a un lado sus diferencias y conflictos para luchar por un objetivo común.

Una actitud que también reclamaron para los empresarios y toda la patronal «si en realidad tienen interés en salvar la industria y las empresas de esta provincia.

No hay recuperación

José Luis Hernández Rivas, secretario provincial de UGT, fue el encargado de denunciar lo poco fiables que son los datos económicos que se están manejando. Hernández Rivas hizo hincapié en la pérdida de activos que está sufriendo la provincia. «Hemos perdido 6.000 estudiantes por las altas tasas y las becas, otros 700 jóvenes se han ido a trabajar fuera. Los que dicen que estamos saliendo de la crisis nos están engañando porque lo que hemos creado son trabajadores pobres», aseguró.

El secretario general de UGT señaló que, para revertir esta situación sería necesario «un plan de choque de empleo, un cambio fiscal por el cual paguen más quienes tengan una renta más elevada, la lucha contra el fraude fiscal, la realización de convenios más fuertes, el aumento del salario mínimo interprofesional hasta el 80% del salario medio, servicios públicos más potentes, un estudio del sistema actual de pensiones que pasará a ser inviable en unos años, y fomentar la creación de industria en Salamanca».

Para los sindicatos, el mercado laboral se mueve para destruir el empleo de calidad, y aseguraron que los datos de empleo no encajan con los datos de crecimiento económico en Salamanca, que ha aumentado en un 3%. «Algo no se está haciendo bien», aseguró Emilio Pérez, quien manifestó que esta situación es «tóxica» para el mercado laboral, ya que hay una parte de la población que se está enriqueciendo pero que no tiene interés en que esto revierta en más empleo.

La manifestación, que discurrió sin incidentes tras partir pasadas las 12 horas desde la Gran Vía salmantina, contó con la presencia de distintas organizaciones y sindicatos, como la CGT y CNT. Pero también pudieron verse pancartas, en favor de la Universidad y la Educación pública. De las Juventudes Socialistas, del PCE, de los trabajadores del Centro de Tratamiento de Residuos..., además de diversos presentantes de partidos políticos, especialmente de izquierdas, que se sumaron a las protestas de las organizaciones sindicales.

El diputado socialista David Serrada, que repetirá en las listas del PSOEen las elecciones del 26-J, aseguró que el de ayer era un día de reivindicaciones porque «hay muchos colectivos ciudadanos y muchas personas que lo están pasando muy mal en nuestro país, y hay que luchar para recuperar los derechos que el Partido Popular ha recortado. Ypor ello, «el PSOEvolverá a trabajar para hacer llegar a los ciudadanos cuáles son nuestros objetivos y nuestras propuestas para conseguir que toda la gente que lo está pasando mal en nuestro país y en nuestra provincia mejore con unas condiciones laborales apropiadas».

En relación a las críticas de los sindicatos a la actitud de los políticos, el también socialista Fernando Pablos, secretario general del PSOE en la provincia, aseguró que su partido no de daba aludido por estas críticas, al menos por lo que respecta a Salamanca, «quién ha llevado los problemas de esta provincia al Parlamento ha sido el PSOE. De los ocho parlamentarios salmantinos, los cinco del PPy el de Ciudadanos no han hecho nada, mientras David Serrada y Rosa López han trabajado a fondo».Además, aseguró que si el autor de los recortes en este país, en alusión a Rajoy, va a tener otra oportunidad es «porque Podemos se ha preocupado de un referéndum en Cataluña, de dónde se sentaban en el Congreso o de si tenían uno o cuatro grupos parlamentarios, pero no de los problemas de los ciudadanos».

También reconoció que desgraciadamente las cifras macroeconómico no tienen nada que ver con la situación real de los trabajadores.