"Aunque embrionario, hemos detectado algún movimiento de Daesh en Senegal"
El Mando de Ingenieros del Ejército de Tierra, con sede en Salamanca, finaliza cuatro meses después su misión en el país africano
redacción / word
Domingo, 3 de enero 2016, 12:08
Las Fuerzas Armadas españolas son una de las pocas instituciones que aún conserva un alto prestigio entre la sociedad, tanto dentro como fuera del país. Este reconocimiento se debe, en parte, a las misiones que han llevado a cabo en el exterior, y eso que los recortes también han hecho mella en materia de Defensa y desde el año 2008 se ha visto reducido su presupuesto un 32 por ciento.
Una de estas últimas misiones internacionales en las que han participado las Fuerzas Armadas españolas acaba de terminar hace tan solo unos días y ha tenido lugar en Senegal. El Mando de Ingenieros del Ejército de Tierra, que tiene su cuartel general en Salamanca, ha mandado a 31 militares durante cuatro meses al país africano para adiestrar y formar al ejército senegalés en distintas materias.
"La operación surge a raíz de una visita que hace a Dakar el ministro de Defensa, Pedro Morenés", detalla el teniente coronel Jesús González Laso, encargado de la primera fase de la misión que salió en el mes de septiembre. Es entonces cuando el Gobierno de Senegal muestra su preferencia para que instructores españoles se desplacen al territorio africano y refuercen de esta manera sus capacidades militares.
Y es que Senegal es un islote de seguridad dentro de la región por el que hay que invertir. Se trata de un país fronterizo con Mali, en donde reina la inestabilidad propiciada por grupos secesionistas y más actualmente por el terrorismo islamista, que también han buscado cobijo en Mauritania. Por tanto, la estabilidad de Senegal contribuye a mejorar la situación en esa zona de África y por consiguiente, en el resto de Occidente.
Se trata de una misión conjunta en la que otras unidades del Ejército de Tierra, así como la Armada y el Ejército del Aire han contribuido, pero el Mando de Ingenieros ha tenido un peso importante en comparación con otras operaciones. Hasta la ciudad de Bargny, a 40 kilómetros de Dakar, se desplazaron entre septiembre y diciembre ingenieros del Regimiento nº 11 de Salamanca, el Regimiento nº 12 de Zaragoza y el Regimiento nº1 de Burgos.
Las actividades se han dividido en relación a dos focos principales. Un temario orientado al combate contra artefactos explosivos improvisados, del que se ha encargado el Regimiento de Burgos, y que es la principal amenaza a la que se enfrentan en la actualidad. El otro tema de instrucción estaba relacionado con la construcción de infraestructuras, generación de suministro de energía eléctrica, construcción de bases en operaciones, rehabilitación de instalaciones y captación y distribución de agua, en el que han contribuido los Regimientos nº12 y nº11.
Uno de los principales cometidos de los ingenieros militares senegaleses es apoyar al desarrollo del país y por esta razón tienen interés en formarse en todas estas especialidades. "Proporcionar electricidad en lugares remotos, captar agua y potabilizarla son algunas de sus prioridades", detalla el Teniente Coronel Juan José Pérez.
Antes de llevar a cabo este tipo de misiones los militares que van a participar reciben una preparación específica sobre el tipo de cultura y los riegos que existen en el país de destino. "La mayoría de la población en Senegal es musulmana pero profesan un islam muy moderado. También hay minorías cristianas y animistas. Hoy por hoy no hay ningún problema entre las religiones aunque sí que se ha detectado algún movimiento de influencia de Daesh pero todavía son embrionarios y sin capacidad para actuar", explica el teniente coronel Pérez.
En esta ocasión, además de la cultura, el idioma ha sido uno de los obstáculos con los que ha tenido que enfrentarse el destacamento. En Senegal se habla de manera oficial el francés y los oficiales del país africano tienen escaso conocimiento de inglés, así que el equipo español, pese a no pertenecer a un centro de formación, se ha preparado unas clases muy técnicas en un idioma que no es el suyo.
"Estamos muy orgullosos de la misión y del trabajo que hemos desarrollado en cada una de las distintas actividades de Ingenieros. Además, pese a la barrera del idioma ha habido una excelente relación con los oficiales de Senegal y lo más probable es que se vuelva a repetir la experiencia el próximo año", declara el teniente coronel Laso.
En esta ocasión, el petate llega justo a tiempo y el Mando de Ingenieros pasará las Navidades en España no obstante, siempre permanecen listos para volver a la acción donde el deber les llame.