Morille reivindica la presencia del arte contemporáneo en el mundo rural
Elena Gómez
Lunes, 20 de julio 2015, 13:25
La localidad de Morille cerró ayer su decimotercera edición del PAN, el Encuentro y Festival Transfronterizo de Poesía, Patrimonio y Arte de Vanguardia, con un claro mensaje: la reivindicación de la presencia del arte contemporáneo en el mundo rural, rompiendo así con la imagen de que lo moderno está reservado a las zonas urbanitas.
Durante tres largas e intensas jornadas, el municipio se ha llenado de actividades, muchas de ellas simultáneas, cuyo resultado ha dejado «muy satisfechos» a sus organizadores, tal y como destacó en conversaciones con este medio Manuel Ambrosio Sánchez, alcalde de Morille y director del PAN.
«El lema de este año ha sido Difícyl, y verdaderamente el PAN ha respondido a esa idea, ya que resulta muy dificultoso el poderlo organizar en un pueblo de escasos recursos de todo tipo que se suplen con la voluntad de la organización, de los vecinos y de toda la gente que colabora de dentro y fuera de Morille», señalaba Sánchez.
En este último aspecto, cabe destacar la fuerte presencia de colaboradores y público portugués, dado el carácter transfronterizo del evento que, incluso, este año ha dado un paso al frente y tendrá una segunda parte, celebrando el primer PAN en Carviçais, en el concejo de Torre de Moncorvo perteneciente a Portugal, el próximo fin de semana.
«El PANde este año pretende llamar la atención sobre que es posible otra forma de hacer cultura:popular, participativa y entre los territorios», añadía el director del festival, quien señalaba que «con muy pocos recursos se puede conseguir un resultado de unión de pueblos que a nosotros nos parece básico, por eso este PAN también se celebrará en Portugal».
Este salto al otro lado de La Raya ha sido posible gracias a la colaboración de las administraciones, «especialmente del concejo de Torre de Moncorvo con su presidente Nuno Gonçalves a la cabeza».
Sin embargo, la colaboración con instituciones y, sobre todo, entidades y agrupaciones lusas en el PAN no es una novedad este año y, de hecho, ayer mismo, hubo una fuerte presencia de grupos de Portugal, destacando especialmente la actuación del Grupo de Danças e Cantares da Cercig, una cooperativa de Guarda que trabaja con personas discapacitadas y que, con su muestra de canciones y bailes tradicionales, congregó a un buen número de personas en el público, que les brindaron un aplauso tras otro.
Neoverracos
También durante la jornada de ayer se puso fin a la I edición de Neoverracos, un taller de escultura mediante soldadura y forja impartido por José Antonio Elvira que se lleva desarrollando en el municipio desde el pasado día 12.
En él, 9 alumnos de diferentes universidades en España y Portugal han podido realizar sus creaciones con diferentes metales.
«Llevábamos dos años buscando la forma de conseguirlo, porque no es fácil ya que tiene un presupuesto de 8.000 euros y Morille no podía hacer frente al mismo. Finalmente se ha conseguido con la colaboración del director, José Antonio Elvira, de otros escultores y soldadores que han venido en un equipo de apoyo y, sobre todo, gracias a los ocho municipios cuatro españoles y cuatro portugueses que hemos aportado cada uno 1.000 euros, que ha permitido financiar el curso», indicaba Manuel Ambrosio Sánchez, destacando además el talento de los nueve estudiantes, a los que tachó de «magníficos» y valoró especialmente su dedicación.
Esta iniciativa no nace, en principio, con una visión de continuidad.«Es difícil que se vuelva a repetir porque el esfuerzo es inmenso para todos. Neoverracos ha surgido y ha llegado a buen término, quizá la iniciativa se puede repetir pero con otra temática y otra técnica», añadía.
Homenaje
Durante los tres días del XIII PAN de Morille han sido muchas y muy variadas las actividades que se han desarrollado: desde talleres a conferencias, recitales poéticos o animación de calle, sin olvidar las exposiciones con las obras de más de una veintena de artistas.
Sin embargo, el broche final antes de la clausura oficial que contó con el concierto del Grupo de Cavaquinhos da Escola Municipal Sabor Artes estuvo marcado por la emoción. Y es que, en el particular entorno del Cementerio de Arte de la localidad, se llevó a cabo un homenaje a Leandro Vale que empezó con un teatro de marionetas, con texto y escenografía del recientemente desaparecido actor, director, escritor y periodista portugués, seguido de un documental y del enterramiento de la televisión en la que se pasó dicho documental.
«Para nosotros este enterramiento es muy importante ya que el dramaturgo portugués Leandro Vale, uno de los más importantes del siglo XX y que falleció hace pocas semanas, era un asiduo del PAN de Morille y venía siempre que se lo permitía su salud», señalaba el alcalde. El documental de Vale elegido fue Aqui jaz a minha casa (Aquí yace mi casa), «que creemos que tiene un título muy oportuno para esta situación», el cual se pasó en portugués.
El PAN de Morille cerró así una nueva edición demostrando que el arte, como los sentimientos, no tienen límites y no son algo exclusivo de determinados entornos. En este sentido, Sánchez señala que «creo que es un prejuicio suponer que el arte actual solo se desenvuelve en las grandes metrópolis.El arte de vanguardia, al igual que el clásico, puede gustar a todos, no tiene que ver con una ubicación física. Es más, creo que en muchas facetas es mejor entendido y aceptado en el medio rural o los espacios periféricos, por muchos aspectos, pero sobre todo porque creo que la ingenuidad que permite aceptar, criticar y valorar lo nuevo se conserva mejor en los espacios rurales».