El Real Valladolid Juvenil se desayuna al Móstoles

La superioridad blanquivioleta quedó esbozada en el minuto 1, cuando una gran jugada de Castri acabó en las botas de Canito que perdonó el gol. Popi y Adri Carrión empezaron a rasgar bien las bandas del ataque, pero fue una subida del lateral derecho Iker Pérez la que propició el 1-0. Iker dio un pase al hueco a Canito, libre de marca, y esta vez el centrocampista no perdonó. Solo habían pasado ocho minutos y el Pucela ya disponía del mando del partido.

El Móstoles sufrió los efectos del varapalo tempranero y quedó a merced de un Juvenil blanquivioleta que dominaba la pelota con largos ataques. Las ocasiones caían del lado local: Maroto pudo anotar tras un mal despeje de la zaga mostoleña y Castri estrelló la pelota en un defensor tras un gran pase de Popi. El Real Valladolid se gustaba y trenzó acciones de bella factura como una combinación entre Popi, Diego Moreno y Canito que volvió a perdonar este último.

Una nueva gran cabalgada de Iker Pérez por la banda permitió consumar el 2-0. El lateral colocó con precisión la pelota en el área pequeña y allí Castri, muy atento, embocó el centro de su compañero.

El Móstoles quiso encomendarse a Borrasca, su principal referencia ofensiva, pero Rayan y Gómez le dieron poca tregua. La entrada de Isailovic por un combativo Adri Carrión desplazó a Castri a la banda derecha del ataque. El delantero recién ingresado tuvo mala suerte. Tras pelear ardorosamente algunos balones y disponer de una buena ocasión de gol, Isailovic cayó lesionado y dejó su puesto a Chuky en un triple cambio de Baptista a falta de diez minutos para la conclusion.

El Real Valladolid Juvenil creó más peligro que el Móstoles en una segunda parte muy controlada, donde el portero Aceves solo tuvo que intervenir para despejar de puños algunos envíos laterales. En un lanzamiento de falta, Maroto mandó un gran balón al área que se paseó con mucho peligro sin que ningún atacante blanquivioleta lograse rematarlo. Una brecha en la cara obligó a Baptista a retirar a Rayan en el tramo final. Popi y Chuky merodearon por el área del visitante de Dani Vlad y crearon varios incendios en los minutos finales, aunque el Pucela no pudo estirar más el marcador. Los Anexos son una caja de caudales para los chicos de Julio Baptista: tres partidos en casa, tres triunfos y ni un solo gol en contra.