El Real Valladolid Juvenil pasa el rodillo ante el Extremadura

El planteamiento del duelo deparó desde el inicio un duelo muy físico. El Valladolid se hizo con el control de la posesión con el permiso de un bando local que alternó el repliegue con una intensa presión que estuvo cerca de dar sus frutos en el minuto cuatro. La presión de Vargas sobre Aceves provocó el error del meta en el golpeo. El esférico le cayó al ariete Amaya en la media luna, desde donde armó un chut que acabó pegando en Vargas, que estaba en fuera de juego tras el lance anterior.

El bloque pucelano fue tomándole el pulso al Extremadura y, antes de la media hora de juego, dispuso de dos ocasiones para romper la igualdad inicial. Alvy estuvo cerca de culminar una larga jugada en ataque con un buen movimiento en el interior del área que acabó interceptando un zaguero justo antes de que consiguiese disparar. Castri sí pudo llegar a rematar otra buena acción en ataque del Valladolid. Incluso su remate cruzado acabó dentro de la portería, pero el colegiado castigó una falta previa -muy dudosa- de Slavi.

El gran juego del equipo forastero hacía presagiar que el tanto iba a llegar tarde o temprano. A la media hora, Iker filtró un buen pase para Slavy a la altura de penalti. Volvía a estar todo a favor para que llegase el tanto, pero apareció Facu para rozar un lanzamiento que salió cerca del poste. En el córner posterior, Jesús remató alto en una posición muy ventajosa.

El conjunto de Ángel Gutiérrez pasó entonces a jugar la baza del nerviosismo ante un Valladolid que no dejaba de sumar fallos en la definición. Antes del intermedio, Javi Díez y Alvy desaprovecharon un doble remate tras un centro de Iker. Parecía encaminado el encuentro a irse con empate al descanso, pero apareció Javi Díez para peinar una falta lateral botada desde el costado derecho ante la que no pudo responder Jorge.

La segunda parte fue un monólogo del Valladolid. El Extremadura se desmoronó, no alcanzando ni a ser una sombra de lo que fue en el primer acto. Los fallos del primer acto se transformaron en un carrusel de aciertos que acabaron en goleada.

Justo tras la reanudación, Héctor cabeceó de forma imponente un córner para anotar el segundo. Sobrepasada la hora de juego, Castri empaló una volea que se coló por la escuadra ante la mirada impasible de un Jorge que no sabía la que se le venía encima. Con la suerte de cara, Slavy consiguió resarcirse de los errores del primer tiempo con un sublime tiro libre directo a la escuadra.

El bando locatario siguió sin dar señales de reacción y, en el 72, Adrián Carrión anotó 5-0 tras dejar en evidencia a toda la zaga del Extremadura en una acción individual. El partido era una fiesta para el Valladolid y tras el saque de centro Slavy consiguió anotar su segunda diana de la tarde en otro error en cadena de la zaga anfitriona.

Diego Iglesias cerró la goleada pucelana tras un nuevo saque de esquina en el que el Extremadura mostró su indolencia. Tras varios rechaces el séptimo ya era un hecho. Con esta aplastante victoria, el equipo pucelano sigue contando sus desplazamientos por victorias y se coloca en la parte alta de la tabla.