El peligro de la 'zona Cesarini' para el Real Valladolid

Renato Cesarini pasó a la historia del fútbol por su habilidad sin igual para marcar goles en los minutos finales.

El centrocampista, nacido en 1906 en Senigallia (Italia), dio momentos de gloria a Chacarita Juniors, Juventus, River Plate y las selecciones de Argentina e Italia (entonces se podía cambiar de combinado nacional).

Con la 'azzurra' marcó ante Hungría uno de sus goles 'in extremis' para la posteridad. Fue en la Copa Internacional (1932).

Su destreza dio origen a lo que se denomina 'zona Cesarini'; el tramo final de los partidos donde todo puede cambiar.

Que le pregunten al Real Valladolid tras el último partido en Granada.

O mejor, que no le pregunten.

Cuando todo parecía conducir al duodécimo empate de la temporada, apareció Carlos Fernández para amargar (otra vez) la existencia al Pucela. Sin embargo, y a diferencia del choque de la primera vuelta, esta vez la diana del delantero rival llegó en el minuto 96, cuando quedaban menos de 60 segundos para que el árbitro pitara el final del choque. La crudeza del sopapo hizo mella en los jugadores blanquivioleta.

El equipo de Sergio González sufrió en el Nuevo Los Cármenes los estragos del último suspiro.

No es la primera vez que le sucede esta campaña.

El Real Valladolid ya se vio engullido por el agujero negro de la 'zona Cesarini' en Zorrilla ante el Valencia, justo antes de las Navidades. Entonces, el Pucela también cuajó un buen partido, plantó cara al rival che de manera brillante y llegó a los últimos minutos paladeando los tres puntos... que al final se quedaron en uno solo cuando sobrevino el mazazo. Manu Vallejo se aprovechó del cortocircuito defensivo blanquivioleta para rematar a gol un centro de Ferran. Corría el minuto 94 y los dos futbolistas del Valencia vivieron libres de marca en esta jugada demoledora.

En la 'zona Cesarini' crece la tensión. Los equipos que persiguen la remontada pegan los últimos zarpazos. Los que ansían mantener su renta miran con tensión los lentos segundos del cronómetro.

El cansancio hace mella. La mente se dispersa. Los nervios se disparan.

Pero justo antes de llegar a ese momento crítico –donde el efectivo Renato Cesarini ejercía de 'salmón' remontador– el Real Valladolid también muestra debilidades. Más de la mitad de los goles que ha encajado esta campaña el conjunto blanquivioleta han llegado a partir del minuto 75. Y ha recibido un tercio de los tantos superado ya el 80.

Cuando el crono alcanza el minuto 75, el Pucela debería extremar todas las precauciones. Catorce de los 27 goles que ha recibido han llegado en ese periodo, lo que le ha supuesto quedarse sin 12 puntos. Y le ha sucedido desde el inicio de la competición.

El Real Madrid le marcó en el 82 en el Bernabéu (el Real Valladolid empató en el 88). El Levante se llevó la victoria con tantos en el 83 y en el 93. Osasuna le empató en el 81. El Villarreal le doblegó en el 77 y en el 89. El FC Barcelona coronó su goleada en el Camp Nou con tantos en el 75 y el 77. El Alavés redondeó su 3-0 con un tanto en el 75. El Getafe cerró su victoria como local en el minuto 82. El Valencia aguó la ilusiones de Zorrilla con el consignado empate en 'zona Cesarini' del 94. El Real Madrid se llevó el triunfo a domicilio en el 78. Y el Granada remontó el pasado sábado con goles en el 81 (el polémico tanto de Antonio Puertas, más con el brazo que con el hombro) y en el 96, con Carlos Fernández incendiando el área blanquivioleta.

El Real Valladolid vive con relativa tranquilidad en dos tramos de los partidos. Entre los minutos 45 y 75 solo ha encajado dos goles (el Betis, en la primera jornada, en el 68; el Villarreal, en el último partido disputado en Zorrilla, en el 54).

Tampoco le va mal en el segundo cuarto de hora de los partidos (entre el 15 y el 29), donde solo ha lamentado dos tantos (del Barcelona y del Alavés). En los primeros 15 minutos ha recibido cuatro tantos (uno del Sevilla, otro del Barcelona, dos del Leganés). Y entre los minutos 30 y 45, se ha llevado cinco (Granada, Athletic, Barcelona, Alavés y Getafe). Pero nada comparable a los 14 goles que ha encajado hasta la fecha a partir del minuto 75.

A la hora de marcar, el equipo de Sergio González reparte más sus dianas. Tres goles los ha generado en el primer cuarto de hora, tres en el segundo y dos en los 15 minutos previos al descanso. Tras pasar por vestuarios, ha logrado otros tres antes del minuto 60, tres entre el 61 y el 75 y seis goles a partir de ese minuto.