El gran desafío estadístico de medirse al Real Madrid
El equipo blanco es el más goleador y el que más disparos efectúa en LaLiga; el Pucela, el que más tiros concede
El Real Madrid presenta máxima potencia de fuego. El equipo que entrena Carlo Ancelotti aparece como el más temible para las defensas rivales por su capacidad ofensiva. Aunque el título liguero se haya prácticamente evaporado tras la última derrota de los blancos en el Camp Nou (2-1), los números muestran la dificultad que entraña hacerles frente, especialmente en su feudo. El Real Madrid aparece en las tablas segmentadas como el conjunto que más se desmelena en ataque, con ráfagas constantes que le sitúan como el que más disparos intenta por partido: 17,2. No hay escuadra más machacona ni con más puntería porque los números dictan que 5,8 de esos disparos encuentran los arcos rivales. Y, con 51 goles anotados, el Real Madrid comanda también la estadística de fecundidad realizadora en el campeonato español.
Además, su vocación atacante se incrementa cuando juega como local. Los 17,2 tiros que promedian los blancos por partido suben hasta los 19,5 en el Santiago Bernabéu y también los lanzamientos a puerta, que se incrementan hasta los 6,6. Estos números reflejan el tormento que suele suponer visitar al Real Madrid en su feudo y la exposición que padecen las defensas visitantes.
El Real Valladolid se verá obligado a multiplicar su esfuerzos atrás porque el equipo que entrena José Rojo 'Pacheta' tiene el dudoso honor de liderar, junto con el desahuciado colista Elche, la estadística de disparos concedidos por partido. El Pucela ve cómo sus rivales intentan una media de 15,3 tiros por encuentro, todo un suplicio para su portero. Esto se debe a la vocación ofensiva del cuadro blanquivioleta (que aparece en sexto lugar entre los que más disparos efectúan, aunque sea el segundo que menos goles marca) y la idea de juego vertical que propugna Pacheta. Ya se sabe que en el fútbol la manta táctica solo puede tapar pies o cabeza. Y como suele suceder en la dicotomía casa-fuera, esos 15,3 disparos concedidos suben hasta los 17,5 cuando el Pucela se desenvuelve a domicilio.
El Real Madrid suele ejecutar la mayoría de sus tiros por el centro (59%) y explota más la banda izquierda (25%) que la derecha (16%) en sus direcciones de lanzamiento, según reflejan las estadísticas posicionales. Un total de 30 de los 52 goles logrados por los blancos se han producido en acciones de juego abierto, diez a balón parado, siete de penalti, tres en contraataque y uno en propia meta de los rivales. Karim Benzema, con una media de 4,6 tiros por encuentro y once goles en Liga hasta la fecha, lidera la gran producción ofensiva de los blancos. Vinícius Júnior y Fede Valverde, con ocho y siete dianas respectivamente, aparecen a continuación en la tabla de goleadores del equipo merengue. Vinícius, además, es el jugador de toda LaLiga que más regates consigue por partido, con un promedio de 3,2, aunque también aparece como el futbolista del Real Madrid al que más le quitan la pelota, como ya demostró el blanquivioleta Iván Fresneda en la primera vuelta.
El Real Valladolid busca igualmente su producción ofensiva con tiros centrados (63% del total) y explota más la parte derecha del campo para finalizar jugadas (21%) que la izquierda (16%). Catorce de los tantos pucelanos han llegado en juego abierto, cuatro a balón parado, uno en contraataque y otro de penalti. Cyle Larin, autor de cinco goles en 188 minutos disputados, saca petróleo de los 2,5 disparos que intenta de media por partido. La otra gran amenaza ofensiva del Real Valladolid pasa por el ahora lesionado Darwin Machís, que ha promediado dos disparos por encuentro, pero sobre todo lidera al Pucela en la estadística de centros al área, lo que favorece la producción y oportunidades de un depredador del área como Larin.
Minimizar toda la capacidad ofensiva del Real Madrid y saber explotar las oportunidades que surjan es el gran reto del Real Valladolid este domingo en el Bernabéu. Aunque ningún equipo tira los partidos, el Pucela puede aprovecharse de la necesidad que tiene el Real Madrid de aferrarse a la Copa del Rey y a la Champions League. Tres días después de jugar con el Pucela, los blancos afrontan la vuelta copera de semifinales ante el FC Barcelona, impelidos a remontar el 0-1 adverso del Bernabéu en la ida. Y el miércoles 12 de abril asoma ya en el horizonte la ida de cuartos de final en la Liga de Campeones ante el Chelsea. La esperanza es que el Real Madrid baje el pistón en la competición doméstica y el Real Valladolid pueda pescar algo en el Bernabéu.
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