Dieciocho muertos y cuarenta heridos tras un ataque con morteros al sur de Bagdad

Al menos dieciocho personas han muerto y más de cuarenta han resultado heridas hoy por el impacto de varios proyectiles de mortero en el barrio de Al Dura, en el sur de Bagdad, según han informado fuentes policiales y sanitarias. Fuentes del hospital Al Yarmuk, en el centro de la capital, han asegurado que han recibido "quince cadáveres y cuarenta y cinco heridos" por las explosiones ocurridas en el citado barrio. Algunos de los heridos han ingresado en estado muy grave, por lo que no se puede descartar que el número de fallecidos aumente en las próximas horas.

El capitán de policía Husam Saad ha explicado que las víctimas fueron causadas por "los impactos de varios proyectiles de mortero que cayeron en viviendas del barrio de Al Dura". Los proyectiles impactaron, alrededor de las 17.30 hora local (14.30 GMT), en las áreas de Abu Deshir y la avenida Al Setín, en el barrio de Al Dura, según Saad, quien ha añadido que en las inmediaciones se encuentra un cuartel de las tropas estadounidenses e iraquíes. Saad ha informado asimismo de que otro mortero impactó en el barrio de mayoría chií de Al Shola, en el noroeste de la capital, causando heridas a dos miembros de una misma familia.

Otros seis iraquíes asesinados

Otros seis iraquíes, entre ellos un general del ejército, han muerto hoy en atentados perpetrados al norte, oeste y suroeste de Bagdad, según la policía local. El general Musab al Raui era tiroteado poco después del mediodía por un grupo de desconocidos cerca de su vivienda, en la ciudad de Ramadi, a unos 100 kilómetros al oeste de la capital, precisó una fuente policial de la zona. Dos agentes de las fuerzas especiales del ministerio iraquí del Interior perdieron la vida en un ataque con proyectiles de mortero lanzados por presuntos rebeldes contra una unidad de ese cuerpo, en la localidad de Al Madain, a unos 30 kilómetros al suroeste de Bagdad.

Además, un policía ha muerto y otros dos han resultado heridos al estallar una bomba cerca del vehículo en el que se trasladaban, en la localidad de Tel Afar, a unos 470 kilómetros al noroeste de Bagdad. El ataque, perpetrado por un grupo armado, ha causado la muerte de dos jóvenes y heridas a otros seis que fueron alcanzados por disparos mientras jugaban un partido de fútbol, en el barrio de Al Mafrag, en la ciudad de Baquba, capital de la provincia de Diala, a unos 65 kilómetros al noreste de la capital, según han informado fuentes locales.

La mañana había sido de inédita calma gracias, sobre todo, a la prohibición del tráfico rodado por el gobierno iraquí como medida para impedir la violencia sectaria en el país. En los diferentes barrios de la capital se podían ver abundantes patrullas de la policía iraquí o del ejército estadounidense, listas para responder a cualquier repunte de la violencia. Estas patrullas son hoy de ocho coches, el doble de lo habitual en cuanto al número de vehículos.

Suníes armados protegen en Bagdad sus mezquitas, que los pasados días han sufrido más de 150 ataques, supuestamente a manos de radicales chiíes. Estos ataques, así como el asesinato a sangre fría de 120 personas según el gobierno -más de 200 según las autoridades religiosas suníes- se han producido después de que el pasado miércoles fuera atacado el mausoleo del Imam Ali al Hadi en la ciudad de Samarra, 125 kilómetros al norte de Bagdad.