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Carolina Conde (Puentecillas), Anne Ruiz (Balonmano P.), Mónica Serafín (P. Rugby), Cristina González (P. Femenino), Mónica Bravo y Beatriz Redondo (Filipenses), Ana Tijero (P. Rugby), Gloria González (P. Femenino), Raquel Rojo (Balonmano P.) y Rocío Díaz (Puentecillas).

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Carolina Conde (Puentecillas), Anne Ruiz (Balonmano P.), Mónica Serafín (P. Rugby), Cristina González (P. Femenino), Mónica Bravo y Beatriz Redondo (Filipenses), Ana Tijero (P. Rugby), Gloria González (P. Femenino), Raquel Rojo (Balonmano P.) y Rocío Díaz (Puentecillas). Antonio Quintero

El deporte femenino se instala en Palencia

Varios clubes de la ciudad analizan los avances que han experimentado en los últimos años, aunque reconocen que aún queda mucho trabajo por realizar

Álvaro Muñoz

Palencia

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Viernes, 8 de marzo 2019, 12:56

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El deporte femenino palentino se une al reivindicativo 8M a base de pases, goles, carreras, canastas, brazadas y demás movimientos deportivos. El deporte femenino se empieza a instalar en la ciudad, aunque los grandes clubes de la ciudad coinciden en que aún falta mucho trabajo para que sus chicas se igualen al género masculino. La evolución de las féminas en Palencia ha sido latente y lo que hace años eran trabas y obstáculos, en el presente ha tornado en más ayudas que sirven para que las deportistas palentinas puedan tener un futuro.

Bien pueden describir estos avances los representantes del Balonmano Palencia Femenino, que arrancaron su andadura hace veinte años y ahora empiezan a recoger los éxitos que sembraron en 1998. «Hace veinte años nacimos con el objetivo de fomentar el deporte femenino en la ciudad. Hace dos décadas tener un club centrado en las chicas no era lo raro, pero era lo menos habitual», subraya el presidente Ignacio Rioseras, quien reconoce que ahora se encuentran más puertas abiertas. «Los pasos que se van dando se están notando, gracias a las ayudas que se empiezan a recibir. Que te pudieran ayudar cuando hablabas de deporte femenino era muy complicado antes. La gente se va concienciando. Ahora todo es mucho más fácil», continúa.

Si el club de balonmano lleva veinte años trabajando por el deporte femenino, la situación varía ostensiblemente con el Palencia Femenino de fútbol, que arrancó su proyecto esta temporada, aunque ya poseían la experiencia de su paso por el San Juanillo. En tan solo un año de creación, la escuela, incluido el equipo senior, ha sumado 50 adeptas que poseen en común su amor por la pelota de fútbol. «Seguramente ahora sea mucho más fácil que hace unos años. Nosotros siempre nos quejamos y me imagino que hace 20 años era mucho más complicado todo», destaca el presidente José Ignacio Reguero 'Zubi', quien reconoce un déficit de entrenadores a todos los niveles. «Faltan muchas cosas por hacer como la falta de chicas que entrenen. Andamos como locos buscando chicas y la mayoría no eligen esa opción por estudios», añade Zubi.

Autocrítica

La historia del Filipenses de baloncesto también es fiel reflejo de la situación actual del deporte femenino. El equipo senior ha vuelto a competir esta temporada después de una campaña en la que no pudieron crear equipo. «Es complicado formar equipo de chicas en la categoría senior. Esperemos que sigan cambiando las cosas, porque tenemos una jugadora como Mónica Bravo, que es madre, trabaja y sigue jugando. Igual que los hombres, las mujeres lo podemos hacer», resalta la coordinadora del club, Matilde Crespo, quien hace autocrítica. «Tienen que cambiar la mentalidad de la mujeres y las familias. Que la mujer trabaje no significa que no pueda hacer deporte. Tiene que cambiar nuestra mentalidad. La juventud, aunque en sus casas ya hayan vivido otra educación, siguen pensando lo mismo. Los chicos sacan tiempo y las chicas se centran en lo suyo. También es culpa nuestra», analiza.

El rugby en Palencia también ha experimentado un gran auge en la ciudad gracias al trabajo del Palencia Rugby Club. El equipo existía a mediados de los 90, pero desapareció y hasta el 2010 no volvió a competir. «Hace nada que se ha incorporado la mujer al mundo del deporte. Queda muchísimo por hacer. Antes se decía que una chica que practicaba deporte era una marimacho, ahora se dice simplemente que es una deportista. Ahora están integradas en el club a todos los niveles. Aquí llevamos las gafas violetas del feminismo bien puestas», destaca el presidente de la entidad, Roberto Cantera.

El atletismo, con el Puentecillas a la cabeza, también ha experimentado este auge y ha visto cómo las chicas ocupaban el Campo de la Juventud. «Ha habido un aumento significativo del deporte femenino en los últimos 10 años, también en el atletismo. Esa cantidad ha traído asociado un aumento de la calidad. Queda una asignatura pendiente que es el abandono deportivo mucho antes que los chicos. Tenemos que trabajar para buscar las causas e incentivar para que no suceda esto», concluyó el entrenador del club Francisco Caballero.

«El fútbol femenino aún está sano, solo busca la pureza del deporte»

El aguilarense y seleccionador nacional femenino sub 19, Pedro López, ha aportado su granito de arena al auge del deporte femenino en los últimos años gracias al trabajo desmedido de una de sus pasiones, el fútbol. Inmerso en la planificación de las competiciones internacionales, este palentino asegura que el fútbol masculino y femenino «son dos mundos diferentes».

–El fútbol femenino ha ganado visibilidad en los últimos años...

–Es algo que se han ido ganando las chicas. Han tenido un éxito que han ganado a la prensa y ahora se empieza a consumir más.

–¿Ese éxito es debido gracias al cambio en la sociedad que se está experimentando?

–Hay una sensibilidad con la mujer y con todos sus derechos. Quizá hace años es algo que pasaba y ahora es impensable. Se intenta localizar en el algún ámbito de la sociedad esos problemas para erradicarlos.

–Aún así el fútbol femenino está a años luz del masculino...

–Son dos mundos diferentes. No se puede comparar. Pasa lo mismo si hacemos una comparación entre el fútbol femenino y el balonmano femenino. El fútbol masculino es un negocio que mueve muchas empresas y mucho dinero y el resto de modalidades van a su ritmo. El fútbol femenino aún está sano y solo busca la pureza del deporte. Estoy convencido de que otros deportes como el rugby, bádminton, balonmano, natación, que también tienen grandes éxitos, se preguntan por qué dan tanta repercusión al fútbol femenino.

–¿Hay un déficit de entrenadoras?

–Eso es una realidad. Puedes ir a cualquier curso de entrenadores y verás el número de chicos y de chicas. No nos tenemos que fijar si en la Primera División hay pocas mujeres, nos tenemos que centrar en los cursos de las territoriales. Tenemos que partir de ahí y empezar a fomentar estos cursos.

–¿Este es uno de los pasos que debería dar el fútbol femenino?

–Estoy seguro de que lo va a dar. El motivo está claro. Todos los chicos hemos jugado al fútbol y en un momento determinado te orientas al entrenamiento. El problema es que las chicas no veían cómo una opción entrenar. No les resultaba atractivo. Eso está cambiando, porque cada vez hay más jugadoras y las competiciones son más atractivas. Ahora tendrán que hacer lo que hicimos antes nosotros. Sacar el curso de entrenadores, gastar el dinero y tiempo y empezar a dirigir un equipo gratuitamente. No nos tenemos que confundir con el 1% del fútbol profesional. El fútbol se mantiene por la vocación que existe en barrios, pueblos y colegios. Y es ahí donde tenemos que analizar y ver el número de mujeres y hombres.

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