La Plaza Mayor de Palencia se convierte en un gran mercado

Atracciones con la forma de un barco vikingo, tiovivos artesanales en hierro y madera, paseos en burro, juglares y puestos de venta de todo tipo de productos elaborados a la antigua usanza, fundamentalmente exquisitas viandas.... Son los ingredientes obligados de cualquier mercado castellano de la época medieval y, aprovechando el puente festivo de las Candelas, el Ayuntamiento ha decidido convertir la Plaza Mayor y la anexa de San Francisco en el escenario de un gran mercado que ayer abrió sus puertas al público.

Más de un centenar de vendedores se dan cita en este gran expositor de productos artesanos que permanecerá abierto hasta el domingo por la tarde en un intento no solo de atraer a los palentinos, sino también como reclamo turístico. Romances, teatro, refranes, talleres infantiles y todo tipo de atracciones complementan un mercado que quiere consolidarse en el programa festivo de la patrona.

«Ya sabemos que estamos en Palencia, y que es 2 de febrero, no esperábamos 20 grados. Aún así, estamos contentos. Hay mucha gente en la Plaza Mayor, se dan un paseo y miran los puestos, y siempre compran algo». Así definía ayer las primeras horas de mercado uno de los artesanos de Santovenia de Pisuerga que se dedica a la elaboración de productos dulces y frutos secos garrapiñados.

Lo cierto es que el clima no acompañó demasiado, ya que la mañana era desapacible, fría y con numerosos ratos de lluvia que no invitaban al paseo. Sin embargo, en torno al mediodía sí que eran numerosos los palentinos y visitantes que se acercaron hasta la Plaza Mayor. Las grandes expectativas, además, están puestas en el fin de semana, cuando los organizadores confían en que se produzca una mayor afluencia de personas.

unto a las cremas y lociones elaboradas con base de productos naturales, recipientes con madera de olivo, bisutería con piedras naturales o juguetes de madera, entre la oferta de los puestos cobran especial protagonismo los productos gastronómicos. Quesos, embutidos, panes, mieles y, sobre todo, muchos, muchos dulces, representan la principal oferta que se puede ver en los diferentes puestos.