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Miércoles, 25 de noviembre 2015, 11:48
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La Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) ha querido rendir un homenaje al compositor palentino Claudio Prieto, fallecido el pasado mes de abril a los 80 años, colocando una placa conmemorativa en la fachada del edificio en el que vivió en Madrid. Coincidiendo con el día en el que el musico hubiese cumplido 81 años, la presidenta del Grupo de Sinfónicos de la SGAE, Cecilia León Rodrigo, descubrió ayer la placa en recuerdo del compositor Claudio Prieto, en un acto en el que la familia del músico ha sido arropada por numerosos autores sinfónicos e intérpretes.
Jesús Glük, Consuelo Díez, Zulema de la Cruz, Tomás Marco, Agustín González Acilu, Carlos Cruz de Castro y Jorge Fernández Guerra fueron, entre otros, los compañeros que se acercaron a las inmediaciones de la calle García de Paredes, número 86, lugar en el que el compositor vivió desde 1982 hasta el día de su fallecimiento, y donde se ha instalado la placa, según informa Efe.
«Dejar constancia gráfica de su figura, tras una obra que se extiende a todos los géneros compositivos españoles, desde la música sinfónica y la música de cámara, hasta la música vocal o los procedimientos electrónicos», señaló Cecilia León Rodrigo, tras descubrir la placa, como el motivo para homenajear la figura de Prieto. Con más de doscientas obras musicales registradas por la SGAE, Claudio Prieto fue socio desde 1964 de una entidad de la que fue consejero en varios periodos, entre los años 1987 y 2007, y que también le homenajeó en vida, el pasado diciembre, con motivo del 80 aniversario del compositor, con una ceremonia en la que se interpretó su obra Sonata 12.
«Estoy segura de que estará sonriendo en algún lugar del cielo», aseguró la hija del compositor, Laura Prieto, tras el acto, en el que quiso agradecer a todos los presentes y a la SGAE la iniciativa, «en reconocimiento a esas pequeñas familias que se forman en los entornos laborales», según señaló. «Mientras recordemos a las personas, estas no mueren del todo. Siempre están en nuestros corazones», concluyó Laura Prieto.
El maestro, nacido en Muñeca de la Peña, entidad ahora integrada en Guardo, inició su trayectoria musical en los años cincuenta como instrumentista de diversas plantillas musicales, entre ellas la banda municipal guardense, y ha trabajado todo el abanico de formaciones instrumentales: solistas, coro y orquesta, tríos, cuartetos y orquestales.
Su trayectoria se inició en Madrid con el estreno en el Ateneo de su obra Improvisación, pero su verdadero lanzamiento llegó con la pieza Solo a solo, para flauta y guitarra, premiada en 1969 como mejor obra española por Juventudes Musicales y cuya difusión se ha mantenido desde entonces tanto en el ámbito nacional como en el internacional. Sus composiciones han sido interpretadas en todo el mundo y ha sido reconocido con numerosos premios.
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