Tudanca, Carnero y Puigdemont

Hay que empezar agradeciendo que en la vuelta del curso político los socialistas de Castilla yLeón hayan decidido poner en marcha en las Cortes de Castilla yLeón un Festival del Humor. La mandamás del PSOE regional, Ana Sánchez, se descolgó esta semana con el mensaje de que AlfonsoFernández Mañueco adelantará las elecciones autonómicas, previstas para 2026, porque, dice ella, se van a agrietar más las relaciones de los dos socios de la Junta, PP y Vox. No consta cuánto tiempo estuvieronMañueco y los suyos partiéndose el pecho de la risa, pero es evidente que la secretaria de Organización del PSOE regional apuesta por el cachondeo en lugar de la seriedad. No porque Mañueco no vaya a adelantar los comicios de 2026 a 2024, sino porque eso le pillaría al PSOE con Luis Tudanca, su secretario regional, que no líder, con todas las papeletas para volver a ser cartel electoral de los suyos. ¡Qué más quisieran Mañueco y el PP que confrontar otra vez con Tudanca! Lleva tatuada en la frente la expresión 'Perdedor' y eso es el mejor aval para un Mañueco que, visto el resultado de las generales de julio, acaricia la pretensión de que el PP reedite aquí las mayorías absolutas o casi.

El secretario regional del PSOE, que no líder, necesita tanto o más que el propio Sánchez el pacto de su partido con los independentistas para que el PSOE presida el Gobierno central. De esa forma, las opciones de un cargo público estatal que saque a Tudanca de las Cortes de Castilla yLeón serían máximas, en lo que en política se conoce como patada hacia arriba

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Ha tardado Tudanca en reaparecer y lo ha hecho después de que la que manda de verdad en el PSOE regional dijera que vamos a ver un Tudanca «muy fuerte y solvente». Sí, definitivamente el PSOE de Castilla yLeón acaba de crear el Festival del Humor. ¿Muy fuerte y solvente quien ni siquiera pudo en julio pasado presentar unas listas propias? Recuerden que el PSOE federal le cambió los candidatos de Ávila al Congreso y de Valladolid al Senado. ¿Cabe más debilidad en un secretario regional? ¿Alguien tiene dudas de que Tudanca de líder tiene lo que el Papa Francisco de estrella del rock? Fuerte y solvente Tudanca... ¡Gran oxímoron para empezar el curso político en Castilla yLeón!

Las otras repercusiones del más que posible pacto socialista con el fugado de Waterloo van a estar a orillas del Pisuerga. Les va a venir a Jesús JulioCarnero y los suyos como anillo al dedo porque, al margen de las escandalosas concesiones que va a hacer Sánchez a Puigdemont, la continuidad del primero en La Moncloa significará que del soterramiento, cero patatero. Ya tendrá así una inmejorable justificación el 'Medioalcalde-mediosenador' de Valladolid ante el electorado sobre un proyecto, soterrar las vías, que tiene menos visos de salir adelante que el de viajar a la luna en monopatín.

Pero no por eso la olla popular de Valladolid perderá ebullición. El PP desalojó en mayo de la Alcaldía pucelana al socialista Óscar Puente con la impagable ayuda del Vox más dócil, apático e indolente de cuantos tiene Santiago Abascal en la piel de toro (¿dónde está Irene Carvajal?), pero en lugar de aprovechar la situación y dedicarse en cuerpo y alma a la Alcaldía, JJ Carnero se salió con la suya de ser senador. Y no contento con dejar a Valladolid con medio alcalde y medio senador, ha anunciado que nombrará un 'coordinador de Políticas Públicas' para, con un sueldo de 85.534 euros, «apoyar» y «dar soporte» (sic) al alcalde. Y por si era poco este dislate, le añade una nota de humor negro (por ser benévolo en la calificación) y se descuelga diciendo que aceptará currículums de quienes quieran optar al puesto. ¡Pero si hasta el que asó la manteca sabe que ese nuevo cargo tiene nombre!: la única duda es si es el de Fernando Rubio (director de AcciónExterior de la Junta) o el de Indalecio Escudero (viceconsejero de Administraciones Públicas).

En esa olla popular en ebullición, quien no debería relajarse es el presidente del PP de Valladolid, Conrado Íscar. Ya ha comenzado desde la Plaza Mayor (lo hizo el día de la toma de posesión en la Diputación) el proceso de acoso y derribo al de Matapozuelos. Los de Carnero quieren devolver a este el cargo que consideran suyo y del que fue apeado por Casado y Egea. Claro que después de verle este verano sujetando una pancarta en una manifestación contra la política sanitaria de Mañueco, lo extraño es que a Conrado Íscar no le crezcan los enemigos.