Estos son los métodos más seguros para viajar con nuestra mascota

En España, la ley es ambigua en lo referente al transporte de mascotas. Solo se hace alusión a ellos en el artículo 18.1 del Reglamento General de Circulación, que dice lo siguiente: «El conductor de un vehículo está obligado a mantener su propia libertad de movimientos, el campo necesario de visión y la atención permanente a la conducción, que garanticen su propia seguridad, la del resto de los ocupantes del vehículo y la de los demás usuarios de la vía. A estos efectos, deberá cuidar especialmente de mantener la posición adecuada y que la mantengan el resto de los pasajeros, y la adecuada colocación de los objetos o animales transportados para que no haya interferencia entre el conductor y cualquiera de ellos». No cumplir con el reglamento puede suponer entre 100 y 200 euros de multa para el dueño o la persona responsable.

Pero, más importante que la sanción que podamos tener por no llevar a nuestras mascotas de manera correcta, es que tanto ellos como nosotros viajemos de forma segura. Por ello es muy importante elegir un sistema de retención que haya mostrado su eficacia en ensayos de choque o que estén homologados por la normativa europea; así como también debemos tener en cuenta su tamaño y peso.

Estos son los tres sistemas de retención recomendados por el Real Automovil Club de España, RACE:

1.

El arnés. Está especialmente recomendado para perros de todos los tamaños y es la forma más extendida que estos peludos tienen para viajar. Debe colocarse en los asientos traseros y sujetan a la mascota mediante el cinturón de seguridad.

Debemos tener en cuenta que la sujección con el cinturón tiene que ser corta, de lo contrario el perro podría golpearse contra el asiento delantero. Así como evitar el uso de collares o el arnés de un solo anclaje, pues en caso de accidente podrían romperse y causar lesiones tanto a nuestros peludos como a nosotros.

2.

La rejilla de separación. Permite habilitar el maletero para el transporte de perros de mayor tamaño. Sin embargo, para que esta medida sea efectiva hay que tener en cuenta el anclaje de la rejilla, preferiblemente que llegue del suelo al techo, así como la estabilidad de los respaldos traseros del vehículo.

También es recomendable combinar la rejilla de separación con el transportín.

3.

El transportín. Es el método más seguro y dependiendo del tamaño de nuestro can o gato tenemos que colocarlo en diferentes zonas del vehículo. Si viaja con nosotros un felino o perro de tamaño pequeño, la posición más recomendada es en el suelo, detrás de los asientos delanteros.

En el caso de peludos de mayor tamaño su posición ideal es en el maletero. Deberá ir colocado lo más cerca posible del respaldo, sujeto y en posición transversal con respecto a la dirección de la marcha, es decir, de lado.

En ningún caso debe colocarse el transportín sobre los asientos traseros y sujeto con el cinturón, las pruebas de seguridad han demostrado que en caso de colisión la caja se rompe y la mascota sale despedida.