Localizado el motorista que tapaba la matrícula con la mano al pasar por los radares

La Policía Municipal de Pamplona ha terminado dando con el motorista que prácticamente a diario era fotografiado por un radar fijo mientras descendía la Cuesta de Beloso de Pamplona a gran velocidad. La forma que tenía de eludir las denuncias este hombre era de lo más rudimentaria: cuando pasaba junto al radar, tapaba la matrícula de su ciclomotor con la mano. Así de sencillo. Pero esta argucia no le ha servido para librarse de una severa sanción, tal y como ha anunciado la Policía Municipal de Pamplona a través de sus redes sociales.

Los agentes llevaban días buscando un ciclomotor rojo para poder sancionar al autor de las repetidas infracciones en esta vía, que une la capital navarra con Burlada en una pendiente en la que se suele sobrepasar el límite de velocidad.

La Cuesta de Beloso cuenta con una cabina fija de radares cuyo dispositivo es capaz de controlar vehículos por hasta seis carriles, pero las argucias de este motorista le permitieron evitar la multa hasta que finalmente fue descubierto por la Policía.

Ahora el infractor no solo se enfrenta a las multas acumuladas por exceso de velocidad. También se puede considerar que su repetida actuación interfiere con el artículo 76 de la Ley sobre Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial, que establece como una infracción grave el hecho de «incumplir la obligación de todo conductor de verificar que las placas de matrícula del vehículo no presentan obstáculos que impidan o dificulten su lectura o identificación».

Incluso se puede catalogar su forma de actuación como una infracción muy grave, ya que se puede interpretar que interfiere en el correcto funcionamiento de los sistemas de vigilancia del tráfico. En este caso, el castigo es mucho mayor, ya que se equipara a la instalación de inhibidores de radares, lo que supone la retirada de seis puntos del carnet de conducir y una multa de entre 3.000 y 20.000 euros.

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