Borrar
Consulta la portada del periódico en papel
Angela Merkel y Ahmet Davutoglu visitan a una familia de refugiados en el campo de Nizip 2, en Gaziantep.
Merkel visita un campo de refugiados en Turquía en plena tensión por el acuerdo migratorio

Merkel visita un campo de refugiados en Turquía en plena tensión por el acuerdo migratorio

La canciller alemana, junto al presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk y el primer ministro turco, Ahmet Davutoglu han visitado un campo de refugiados sirios

colpisa / afp

Sábado, 23 de abril 2016, 16:19

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Varios dirigentes europeos, entre ellos la canciller alemana Angela Merkel, han visitado este sábado un campo de refugiados en el sur de Turquía para reafirmar el acuerdo migratorio con Ankara, en un contexto de tensión por las presiones en contra del pacto.

El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, el vicepresidente de la Comisión Europea, Frans Timmermans y Merkel visitaron junto al primer ministro turco, Ahmet Davutoglu, un campo en Gaziantep, cerca de la frontera siria.

Abierto en 2013, el campo de Nizip 2 acoge en casas prefabricadas a cerca de 5.000 refugiados sirios, entre ellos 1.900 niños, según cifras del gobierno turco.

En una de las entradas al campo una pancarta rezaba 'Bienvenido a Turquía, el país que más refugiados acoge en todo el mundo'. En el país hay 2,7 millones de refugiados sirios.

En conferencia de prensa el primer ministro turco, Ahmet Davutoglu, ha recordado la importancia de la exención de visados de entrada a la Unión Europea para los turcos como parte del acuerdo migratorio, un tema que ha tildado de "vital" para su gobierno.

El primer ministro ha declarado estar "confiado" de que la UE hará lo necesario en este asunto, que forma parte de "una promesa del gobierno su pueblo".

Un controvertido acuerdo

La visita llega tres semanas después de entrar en vigor un controvertido acuerdo entre Bruselas y Ankara, que pretende disuadir los viajes clandestinos por mar de migrantes y refugiados hacia Europa, confrontada a su mayor crisis migratoria desde la Segunda Guerra Mundial.

Turquía se ha comprometido a aceptar el regreso a su territorio de todos los migrantes que hayan entrado ilegalmente en Grecia desde el 20 de marzo. El plan prevé que, por cada refugiado sirio expulsado a Turquía, otro sirio sea "reinstalado" en algún país europeo, hasta un límite de 72.000 refugiados.

A cambio, los europeos han aprobado una ayuda financiera de hasta 6.000 millones de euros a Turquía, y han aceptado relanzar las conversaciones sobre su adhesión a la UE y sobre la exención de visado para los turcos que deseen entrar en la Unión.

Los dirigentes turcos han advertido de que no están obligados a respetar el acuerdo migratorio si los europeos no cumplen sobre la exención de visados

El ejecutivo europeo ha indicado que presentará un informe al respecto el 4 de mayo. "Tengo la intención de cumplir con los compromisos siempre que Turquía muestre resultados", dijo la canciller alemana, en relación de los 78 criterios establecidos por Bruselas, de los cuales ha cumplido cerca de la mitad.

En la conferencia de prensa el presidente del Consejo Europeo dijo que Turquía "es el mejor ejemplo para el mundo" sobre cómo tratar a la los refugiados.

Esa afirmación contrasta con la posición de la ONG Amnistía Internacional, que insiste en que Turquía no es un "país seguro" para los refugiados y acusa a Ankara de haber devuelto decenas de personas a Siria, donde la guerra ya ha dejado más de 270.000 muertos.

Durante la visita al campo e Nizip Merkel se reunió con algunos de los niños y jóvenes que dibujaban sentados en una de las aulas de clase.

Los niños le entregaron regalos a la canciller y varios la saludaron con besos. "Tenemos escuelas y hospitales, la vida es buena aquí, pero queremos saber cuál es nuestro futuro (...) Si la guerra se termina hoy, yo vuelvo a Siria mañana", dijo a la AFP Mohammed Tomoq, un hombre de 49 años que huyó de Damasco con su mujer y sus cuatro hijos.

Hasta ahora la UE se ha gastado 77 millones de euros en varios proyectos en Turquía, a los que pronto se sumaran otros 110 millones.

Ejercicio de equilibrio diplomático

En la visita los dirigentes europeos se han enfrentado a un ejercicio de equilibrio diplomático entre la posición del gobierno turco sobre el acuerdo y las críticas de las organizaciones de defensa de los derechos humanos.

Uno de los temas sensibles fue la cuestión de la libertad de expresión y de prensa en Turquía, donde el viernes comenzó un juicio contra cuatro académicos acusados de "propaganda terrorista", y dos conocidos periodistas, por "espionaje".

La canciller había previsto inicialmente viajar a Kilis, provincia vecina a Gaziantep, pero el lanzamiento de varios disparos de mortero en la zona atribuidos por Ankara al grupo Estado Islámico (EI) obligaron a cancelar la visita.

El gobernador de la provincia de Konya ha anunciado este sábado la detención de seis supuestos miembros del EI preparados para atentar contra "dignatarios del Estado" a pocas horas de la llegada de los líderes europeos.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios