Rebeca, la nueva expulsada de 'Gran Hermano 17'

Ayer jueves se desarrolló la octava gala de 'Gran Hermano 17' y que como cada año, por estas fechas, ha servido para que los habitantes de la casa celebren la fiesta de Halloween. Para disfrutar de la temida noche de los muertos vivientes, los concursantes se desplazaron hasta el apartamento, donde degustaron una cena muy especial. Cuando estaban allí, el conductor del programa, Jorge Javier Vázquez, apuntó: «Quedan muy pocos minutos para que uno de los tres abandone la casa».

En esta ocasión, la expulsión fue diferente ya que los nominados cambiaron la sala de expulsiones por el salón del apartamento. Tampoco estarían solos, sino que estarían acompañados por sus compañeros, ante los que Jorge Javier Vázquez anunció la decisión del público: «La audiencia ha decidido que debe abandonar la casa... ¡Rebeca!». Al conocer la noticia, la madrileña comentó: «Yo lo sabía, os lo he dicho. Estad tranquilos» y añadió: «Chicos, pase lo que pase no os preocupéis que yo estoy fuera a tope, no me importa lo que hayáis dicho. Pasadlo a tope, qué envidia, cabrones».

Al ver la reacción de sus compañeros, Jorge Javier le dijo a la madre de la recién expulsada: «Pues no se les ve muy afectados por la expulsión. Ha pecado de cándida tu hija... y, por ser así, está aquí esta noche», a lo que la madre contestó: «No se puede cambiar a la gente».

Lo cierto es que Rebeca nunca llegó a integrarse en la casa. Ella misma confesó que no se había sentido querida ni identificada con sus compañeros y que, aunque volvería entrar, no lo haría con la misma gente.

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