"Me quito algún año... y cuela"

María Patiño lleva 15 años en los platós de televisión. Su ya famosa vena hinchada y la intensidad con la que defiende y ataca le han llevado hasta el sillón del presentador de 'Sálvame deluxe', arrebatando el puesto a Terelu. Patiño se ha quedado sin fines de semana porque Mediaset, para mejorar sus pobres audiencias del fin de semana, emite 'Sálvame' por partida doble, viernes y sábados. La semana pasada se estrenaron con la fórmula y les dio resultado: 1,2 millones de espectadores, líderes de la velada.

¿Se prepara psicológicamente para 'Sálvame'?

No me hace falta, soy intensa de por sí. He trabajado en 'Dónde estás corazón' ocho años, con entrevistas muy complicadas, así que me ha resultado fácil adaptarme.

¿Se lleva en la sangre?

Por carácter soy bastante 'discutona', me sale solo y hay formatos en los que estoy más a gusto.

¿Siempre tuvo claro que lo suyo era el mundo del corazón?

Para nada. No soy periodista vocacional, siempre quise ser actriz. Mis padres me dijeron que estudiara una carrera seria y elegí esta porque la vinculaba con la tele.

¿Por qué defiende impartir prensa rosa en la facultad?

Estuve mucho tiempo en agencias, escribiendo, y me di cuenta de que no sabía. Tiene su técnica. Cuando lo comenté, la gente se indigno muchísimo. Pero cualquiera no está preparado.

¿Por qué defiende impartir prensa rosa en la facultad?

Estuve mucho tiempo en agencias, escribiendo, y me di cuenta de que no sabía. Tiene su técnica. Cuando lo comenté, la gente se indigno muchísimo. Pero cualquiera no está preparado.

'Sálvame' sería una buena escuela de prácticas.

No es un género como tal. Es un show con informaciones y con sentido del humor. Donde hasta los comentaristas se convierten en noticia.

Pérez Reverte llama inculta a su audiencia... ¿Qué dice?

Es lo típico que llevo escuchando veinte años. Solicito originalidad en los ataques. Cuando eres joven te ofende más. Respeto al espectador y no me atrevo a decir que el que ve 'Sálvame' no compra el periódico.

Terelu decía que no le veía como presentadora. ¿Por qué?

Entendí que lo que dijo es que no me había visto presentando porque le causa dolor. Aún así, soy partidaria de la libertad de expresión.

¿Entiende la postura?

Ella ha reconocido que a nadie le gusta perder su trabajo, una actitud honrada y honesta. Todos tenemos nuestro ego y no nos gusta que nos sustituyan.

¿Qué características suyas valora la audiencia?

La misma característica que una persona adora, otra la detesta. Mi vehemencia para unos es maravillosa y a otros les estresa. Me da mucho pudor hablar de mí.

¿Qué sintió cuando Kiko Hernández, en el polígrafo, confesó que le atraía?

Me puse muy roja. Me he adaptado tanto a la crítica constante que me ruborizan los piropos. Y si te lo dice un chico, más. En ese sentido soy bastante quinceañera.

Reconoce que tiene el síndrome de Peter Pan. ¿Le cuesta cumplir años?

Entiendo que hay que llevarlos con dignidad, que la arruga es bella, que da experiencia... La teoría me la conozco, pero por mí, me quedaba como estoy.

¿Suele confesar su edad?

Estoy empezando a mentir... Veinte años no digo, pero alguno me quito y todavía cuela. Me parecen fascinantes entre los 25 y 35.

¿A quién le gustaría entrevistar en el programa?

A Isabel Pantoja, sin ningún tipo de censura.

Jorge Javier se ha acercado, aunque sea de refilón.

Él entrevista de manera muy diferente. Yo soy más directa, haría lo que me pide el cuerpo, sin adornos. El problema es que no se dejaría preguntar de todo.

¿Y a Isabel Preysler y a Vargas Llosa?

No les cerraría la puerta... Pero a lo mejor nos decepcionarían, vete tú a saber. No es lo mismo verles en Hola que sentados en un plató.