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Reuters
Díaz pide que la digitalización no signifique sueldos bajos y «degradación» del trabajo

Díaz pide que la digitalización no signifique sueldos bajos y «degradación» del trabajo

La ministra de Trabajo asegura que España tiene «políticas erróneas» asentadas en el miedo, mientras que Funcas ve necesaria la «refundación» del Estado de bienestar por la digitalización

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Lunes, 12 de abril 2021, 12:09

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El mercado laboral está viviendo un proceso de transformación nunca visto antes. Se ha pasado de la robotización a la digitalización total de la economía, lo que está dando lugar a un nuevo modelo laboral entre empresa y trabajador. Pero este cambio no puede significar que la economía se asiente sobre la «devaluación retributiva» del trabajo y en su «degradación», según argumentó la vicepresidenta y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, durante su ponencia en la jornada organizada por la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE).

A su juicio, España ha vivido dos crisis profundas y «no puede permitirse seguir manteniendo políticas erróneas asentadas en el miedo», porque se desincentiva el avance hacia una economía «de mayor calidad». Considera que tras la pandemia la digitalización no solo traerá precariedad, sino también trabajos «dignos» con «empresas que compitan en calidad», no solo en costes.

Porque la ministra hizo especial hincapié en las plataformas digitales, poniendo en valor la importancia de alcanzar la Ley de 'riders' porque era una cuestión «de presente y futuro». Además, definió como una «aberración jurídica» las normas por las que las plataformas querían operar al margen de las normas laborales de los países, pero que la «rápida respuesta» por parte de los tribunales ha parado.

Además, en materia de digitalización destacó que el trabajo a distancia requiere la implicación de poderes públicos porque «ha abierto nuevas posibilidad, pero también planteado retos y desafíos en un momento de regeneración económica y social como este». En este sentido, indicó que el teletrabajo no debe ser una «fórmula de abaratamiento de costes»: «La degradación retributiva que ha caracterizado la nefasta época de la austeridad que se produjo durante la crisis financiera no puede seguir caracterizando el modo en que entendemos nuestras empresas y nuestras relaciones laborales», señaló la ministra, que incidió en que los costes vinculados a la producción no pueden recaer en el trabajador.

Ante el nuevo contexto de la digitalización, el director de Coyuntura y Análisis de Funcas, Raymond Torres, explicó durante la misma jornada que en la anterior fase de desarrollo económico no se podía diferenciar claramente entre unos trabajadores y otros, pero que ahora la conexión con la plataforma digital permite una «individualización total del trabajo» y medir con precisión la aportación y productividad de cada empleado.

En su opinión, en este contexto los sectores que más oportunidades de futuro tienen son los que giran en torno a las relaciones interpersonales, como son los de los cuidados, la sanidad y la educación. «La ventaja es la relación interpersonal con el cliente, la proximidad de la demanda», revela Torres, que a su vez indica que el ocio y la cultura también tendrán mucho futuro.

Debido al cambio de paradigma es fundamental la «refundación del Estado de bienestar». Raymond Torres aseguró durante su ponencia en la Universidad de Alcalá de Henares que el sistema actual ha permitido desarrollar este mecanismo de protección con oportunidades para todos, pero con la digitalización «esos instrumentos ya no valen». Nadie sabe qué empleos tendremos el día de mañana y la mitad de las tareas que desarrollamos hoy no existirán en 15 años, argumenta. Por ello, considera «clave» la adaptabilidad de programas de formación de los empleados y que esta educación no descanse solo en los primeros años de la vida.

Pero en su opinión no hay que temer a este proceso de digitalización, porque también significa muchas nuevas oportunidades. En los últimos años se han creado de 30 a 40 millones de empleos netos en el mundo a pesar (o gracias a) la digitalización. De hecho, en esta crisis del coronavirus ha permitido mantener miles de puestos de trabajo gracias a la tecnología -fundamentalmente el teletrabajo-. Torres asegura que sin la tecnología se habría perdido un 10% más de puestos de trabajo en los países desarrollados este último año. «Las tasas de paro apenas han aumentado con la crisis, algo que ningún organismo había previsto. En España solo ha subido dos puntos, frente al desplome del 11% del PIB», explica.

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