«Queremos unir el saber de Pinilla con la innovación industrial de Eurovo»
El grupo italiano Eurovo se fija en Castilla y León para impulsar su expansión en el negocio del huevo
Con setenta años de experiencia en el mercado de la producción de huevos, la empresa familiar Granja Pinilla, con sede en Valladolid, se ha sumado a la red del Grupo Eurovo. Su presidente, Siro Lionello, destaca el potencial de la operación para seguir creciendo en el mercado nacional. «Es una empresa referente en el mercado ibérico y un importante polo de empleo en su zona, reconocida por su compromiso con el bienestar animal, la calidad de sus productos y la buena gestión de su equipo».
–A mediados de año Eurovo adquirió la empresa familiar Granja Pinilla. ¿Qué ha cambiado?
–La adquisición de Granja Pinilla representa un paso estratégico en el crecimiento del Grupo Eurovo en España. Una operación que une las competencias y experiencias de dos entidades que comparten valores importantes como la cadena de suministro, el territorio, la sostenibilidad y la calidad.
–¿Cómo contribuye esta integración al crecimiento de la empresa?
–La sintonía de valores entre el Grupo Eurovo y Granja Pinilla representa un elemento adicional de fortaleza para la integración entre ambas entidades, respetando plenamente a las personas que las componen. Se han mantenido los 80 empleados actuales, valorando sus competencias y garantizando continuidad y estabilidad. La adquisición no será un cambio radical, sino el inicio de un crecimiento conjunto basado en escucha y diálogo con el equipo de Granja Pinilla. Su personal seguirá siendo clave para entender el mercado local, mientras la experiencia de Eurovo aportará valor mediante intercambio y sinergias. Queremos unir el saber de Pinilla con la innovación industrial de Eurovo para ofrecer un producto que supere las expectativas del consumidor. Además, esta integración ofrece nuevas perspectivas en el ámbito de las exportaciones, contribuyendo a fortalecer y hacer más competitiva la presencia del Grupo en el mercado ibérico.
–¿Qué beneficios aporta esta unión en términos de competitividad?
–Una de las ventajas competitivas del Grupo Eurovo es su cadena de suministro verticalmente integrada, una joya y un patrimonio construido en más de 70 años de experiencia que permite tener control directo sobre cada fase de la producción, desde las materias primas para los piensos hasta el producto final. Es un modelo exitoso que hemos exportado también a otros países europeos, como en el caso de España, y que se confirma precisamente con la reciente adquisición de Granja Pinilla.
–Usted señala que esta operación es clave para fortalecer su presencia en el mercado nacional. ¿Qué infraestructuras forman parte?
–Así es, la adquisición de Granja Pinilla representa un paso fundamental para consolidar uno de los principales grupos agroalimentarios de la región. El Grupo Eurovo inició su actividad en el país en 2004, con la compra de la primera granja, y hoy está presente con la filial Marco Polo Comercio, que cuenta con seis granjas y dos plantas para la producción de ovoproductos y la selección y envasado de huevos con cáscara. Por su parte, Granja Pinilla dispone de tres instalaciones productivas, con un centro de selección y envasado, más de un millón de gallinas, ochenta empleados y una facturación que supera los 40 millones de euros. La empresa cuenta con instalaciones fotovoltaicas para una producción más sostenible y participa activamente en la gestión responsable de las granjas.
–¿Qué objetivos estratégicos tienen para la planta en términos de sostenibilidad, innovación y expansión?
–Queremos aumentar la producción de huevos con la creación de nuevas granjas en la región, consolidando así el empleo local y generando valor en el territorio. En el ámbito de la innovación, estamos invirtiendo en la automatización de las dos fábricas. El objetivo es mejorar la eficiencia, reducir desperdicios y tiempos de producción, optimizar los recursos y aumentar la calidad, entre otros. En cuanto a la sostenibilidad e innovación, nuestro compromiso favorece un uso más responsable de los recursos y abriendo el camino a tecnologías avanzadas.
–España se sitúa como el tercer productor de la UE, solo por detrás de Alemania y Polonia. ¿Perciben también un aumento del consumo nacional?
–Sí, al igual que en Europa. Es la proteína más económica para el consumidor, valorada por su practicidad, pero también por razones de salud y por los nuevos hábitos alimentarios, dos factores que han crecido mucho en los últimos doce meses. Esto permite que este ingrediente refuerce su papel clave en la alimentación de los españoles y aumente su presencia en los platos y menús año tras año.
–¿Y cómo se comporta el mercado en Castilla y León?
–El mercado sigue la tendencia nacional a pesar del aumento de precios, el consumo de huevos sigue creciendo en España. El producto mantiene su competitividad como fuente de proteínas accesible y versátil, impulsado por su practicidad y por hábitos alimentarios que lo consideran saludable y esencial en la cocina.
–Pero entre enero y agosto de 2025, el precio de los huevos aumentó un 15,7% respecto al mismo período de 2023. ¿Cómo se determina el precio de venta?
–Influyen varios factores. Los principales son los costes de producción, que incluyen alimentación (piensos a base de maíz y soja), mano de obra, energía, agua, embalaje, envasado y sistemas de calidad. Estos costes se ven afectados por la inflación y las fluctuaciones internacionales. A ellos se suman los costes logísticos, como transporte y almacenamiento, necesarios para garantizar la calidad. También influyen la oferta y la demanda, condicionadas por la estacionalidad, los ciclos de puesta y los hábitos de consumo, así como factores externos como normativas sanitarias. Finalmente, el precio al consumidor incorpora el margen comercial de mayoristas y minoristas para cubrir gastos y asegurar rentabilidad.
–La aparición de enfermedades como la gripe aviar representa un riesgo para la producción. ¿Cómo afrontan estos desafíos?
–Para evitar su propagación, se sacrifican animales en granjas afectadas. El sector del huevo apoya las medidas preventivas del MAPA, vigentes en la UE desde 2006, porque protegen el patrimonio avícola. El confinamiento en zonas de riesgo prohibe la cría al aire libre, afectando a gallinas camperas y ecológicas, que deben permanecer bajo techo o con redes que impidan el acceso de aves silvestres. También se restringe el uso de agua de depósitos accesibles a aves. Eurovo cumple estrictamente con las disposiciones oficiales.
–¿Qué medidas se implementan para reducir su impacto ambiental y gestionar de forma sostenible los residuos?
–Eurovo está comprometido con la sostenibilidad, aplicando economía circular en todas sus plantas: recuperación de agua, reducción de desperdicios y reciclaje de residuos. La elección de proveedores también sigue criterios sostenibles para el territorio y el bienestar de las comunidades locales. Invierte en innovación para reducir impacto ambiental y desarrolla envases reciclables y biodegradables, promoviendo un ciclo productivo responsable.
–¿Y en cuanto a las mejoras para la eficiencia productiva?
–La I+D significa innovación continua, optimización de los procesos industriales, selección de las mejores materias primas y mejora de la calidad y el rendimiento de los productos, en línea con los objetivos del mercado y con fuerte atención a la sostenibilidad ambiental. El objetivo es mantenerse al día con los cambios del mercado, responder a las necesidades de los clientes y anticipar nuevas demandas, tanto en el segmento de consumo como en el profesional. El equipo de I+D aplica competencias y recursos también para apoyar la optimización de las actividades en las plantas de producción, integrando tecnologías avanzadas y soluciones digitales.