María Martínez: «Muchas veces se trata de neutralizar la presión para convertirla en responsabilidad»

Diez años hace que dio sus primeros pasos con la Federación de Triatlón de Castilla y León antes de viajar a Madrid con una beca bajo el brazo para trabajar en el Consejo Superior de Deportes (CSD). Allí sigue hoy, ahora en el Centro de Alto Rendimiento (CAR), desde donde compagina su labor con deportistas de elite –entre ellos la tres veces campeona del mundo de badminton Carolina Marín– con su dedicación parcial al Aula Alimentos de Valladolid. Por el camino ha trabajado también con el equipo nacional de tiro con arco y colaborado en diferentes proyectos. «La psicología es una área más del entrenamiento del deportista y como servicio externo, ofrezco un trabajo a medio-largo plazo, pero lógicamente te tienen más en cuenta cuando ven que están bien físicamente, están bien técnicamente, pero no salen las cosas. Es entonces cuando se preguntan qué está pasando y recurren a nosotros», explica María Martínez, acostumbrada a sentar en el diván a deportistas de disciplinas muy variadas. «Al final las herramientas y los patrones que nos da la psicología del deporte son los mismos. Luego hay que saber aplicarla a cada modalidad. En mi caso puedo estar hablando con un nadador, pero al rato estás con un entrenador o un jugador de badminton o de balonmano».

Los problemas que se suele encontrar son comunes a los de cualquier persona que tiene que alcanzar un objetivo en su trabajo. «Hay una parte de entrenamiento puro y duro que es el entrenamiento de habilidades psicológicas para que tu nivel de concentración y de activación sea capaz de perfeccionar algún aspecto técnico o táctico concreto. Partimos de estar bien para estar mejor. Y luego hay otra parte de solución de problemas o puntos débiles, y aquí lo que más nos encontramos son miedos. Tolerancia a la frustración, trabajo con expectativas, con las emociones, gestionar la presión,... Muchas veces se trata de neutralizar esa presión a la que están sometidos para convertirla en responsabilidad», explica la psicóloga vallisoletana, que considera básico tener un equilibrio –también en lo mental– para alcanzar metas. Es el caso de Carolina Marín, con la que viene trabajando esta temporada junto al resto de integrantes del equipo de badminton en el CAR. «Por eso no hay tantos grandes campeones. En España estamos acostumbrados a tener deportistas exitosos, pero para que salga uno se tienen que encadenar una serie de circunstancias y variables», explica.

A estos niveles, otro de los problemas que se encuentran es la necesidad de volver a competir antes de tiempo cuando sobreviene una lesión. «Es complicado decirle a una persona que entrena seis horas al día que tiene que parar, sobre todo cuando por su cabeza pasa el 'vivo de esto y necesito mi cuerpo para competir'. Cuando hay una lesión paralizante que rompe con tu dinámica, hay una intervención más compleja», reconoce, apuntando que también se puede trabajar en la prevención de las lesiones, muchas de ellas por estrés.