El Villa de Simancas resurge de sus cenizas
Victoria ante un rival directo en su primera final por la permanencia
JAVIER HERNANDO
Domingo, 14 de diciembre 2014, 14:23
En una tarde lluviosa, este sábado el Villa de Simancas se reivindicó como equipo de tercera con su victoria por cuatro goles a dos ante un directo rival por la permanencia, el Real Ávila de Toni Ayala. Los de Diego Macón fueron superiores a los abulenses en un choque que pronto se les puso de cara, con el ratón del área como protagonista, Rodri. El escurridizo delantero puso el dos a cero en apenas ocho minutos de juego en el municipal de Los Pinos. El primero llegó a los dos minutos en una jugada de Kiko por la derecha que logra centrar, y ante la indecisión del meta Darío, el 11 simanquino adelanta a los locales. Sin tiempo de reacción para los foráneos, seis minutos después, una gran jugada por la izquierda del versátil Alvarito que centra para que Zapa deje de cara a Rodri, y marque el segundo.
El Ávila, sin sensación de peligro en todo el partido, acortó distancias a los 24 minutos, con un pase en largo a Vitolo que salva la salida del hoy portero del Villa, Guzón. A diez para el descanso, el colegiado mostró tarjeta roja directa al goleador abulense, Vitolo, por entender que una entrada a Mateo fue excesivamente dura. Con este lastre, los de Ayala hubieron de afrontar el resto del partido. Alvarito lanzó al palo en el 38, tras el saque en corto de una falta por parte de Gallego, una sociedad que funciona a las mil maravillas entre ambos pupilos de Macón.
En el saque de centro de la segunda mitad, Rony Bear, internacional con la República Dominicana y reciente incorporación del conjunto de la ciudad amurallada, conseguía un golazo de tiro lejano, que ponía las tablas en el marcador. Vuelta a empezar para ambos equipos. Cierto que los visitantes, plantilla menos efectiva del grupo octavo, con siete dianas antes del comienzo de esta final, apenas inquietaba a Guzón. Por contra, los de casa no cesaban en su empeño por retomar la senda de la victoria, aunque con los reparos de cuidar su portería, ya que son los que más goles tienen en contra (40 tantos hasta la jornada pasada).
A los 56 de encuentro, Rodri peina un balón que habilita a Kiko por la izquierda. El combativo delantero simanquino ve adelantado a Darío y eleva la pelota para volver a poner por delante al Villa. Gallego, Alvarito y Juli se encontraron con las manos salvadoras del portero abulense en los minutos finales del choque. La última oportunidad del Ávila se hizo esperar hasta el minuto 83, con un remate de cabeza de Mayo a la salida de un córner, que se marchó alto. El definitivo 4-2, llegó por un penalti cometido por el propio Mayo sobre Cristian, que se encargó de marcar Gallego.
Triunfo que significa para los locales algo más que tres puntos y que, aunque no posibilita salir de los puestos de descenso, al menos es una gran inyección de moral para un Villa de Simancas que no da nada por perdido.