Reencuentros palentinos en el Pisuerga

Diez jornadas han transcurrido. 400 minutos de máximo juego en la LEBOro y la igualdad es máxima. Tres equipos lideran la clasificación con ocho triunfos, el Carramimbre Valladolid, el Chocolates Trapa y el Gelteko Gipuzkoa Basket, y dos de ellos se enfrentan este domingo en el Polideportivo Pisuerga en el derbi regional y –sin ninguna duda– en el partido de la undécima jornada.

Que los derbis son especiales no se le escapa a nadie y las dos plantillas, junto con los dos cuerpos técnicos, viven la preparación del partido al máximo, sabiendo de la importancia y de la intensidad del mismo, tampoco. Porque, quieras o no, siempre es algo más que un triunfo. Siempre. Los que vivirán el partido aún un poco más especial son el técnico Carles Marco y el jugador Jordi Grimau, que visitan la que fue su casa hace años.

«Recuerdo que jugamos muy bien los cuatro años que estuve en el club e hicimos muy buenos partidos. El ambiente de equipo era muy bueno. Conservamos mucha amistad. Para mí fueron cuatro años muy buenos a nivel personal», asegura el entrenador del Chocolates Trapa, Carles Marco.

Marco ha visitado ya el Pisuerga –como técnico– con dos equipos distintos, con el Oviedo Baloncesto y con el Chocolates Trapa. A pesar de que se despidió del Fórum en 2002, sigue manteniendo amistad con varios integrantes del club. «El doctor del Valladolid es el mismo que cuando yo estaba, que es Javi Alonso. Tenemos cierta amistad y nos vemos de vez en cuando. También conozco a Hugo López, que estaba en las categorías inferiores. Con Mike Hansen he coincidido en otro equipo y Pepe Catalina, que es el director deportivo y en aquella época era mi representante, así que sí que tengo cierta historia con Valladolid», rememora Marco. Y es que Hugo López, el técnico del Carramimbre Valladolid, y Carles Marco se codearon en el Fórum, cuando el primero entrenaba a las categorías inferiores y el segundo jugaba en ACB.

Jordi Grimau también ha sido visitante en muchas ocasiones, desde que defendió la camiseta pucelana en la temporada 2012-2013. «Llegué un poco de carambola al Valladolid, cuando me mandaron cedido de otro equipo de ACB que no contaba conmigo. Llegué un poco tarde, con la pretemporada ya empezada y todo, pero estuve muy a gusto. En principio parecía que íbamos a ser el peor equipo de la Liga y al final salvamos la categoría con varias jornadas de antelación. Fue un año bonito, ya marcado por los primeros problemas económicos que tenía el club y que luego les llevó a la desaparición, pero yo recuerdo que estuve muy a gusto en el club», rememora con cariño Jordi Grimau.

Cierto es que tanto Carles Marco como Jordi Grimau han disputado multitud de encuentros como visitante, pero es la primera vez que se enfrentan estando ambos conjuntos –tanto el Carramimbre Valladolid como el Chocolates Trapa Palencia– de colíderes.

«El año pasado nos enfrentamos en circunstancias diferentes, no como colíderes. La verdad es que hace especial gracia que haya un derbi y que encima seamos los dos líderes, así que esperemos que nos vaya bien a nosotros y mal a ellos», afirma Marco, que quiere seguir en lo más alto de la clasificación una semana más.

«El equipo llega bien. La verdad que es una semana muy larga, con muchos entrenamientos y muchos días de preparar el partido. Y tenemos ganas de que llegue y de competir bien, para ver si somos capaces de mantener el nivel y hemos mejorado cosas que estamos trabajando en ello. Estamos contentos de cómo nos están saliendo las cosas y el objetivo es intentar mantenernos ahí arriba todo el tiempo posible y, de momento, la primera oportunidad es este domingo ante el Valladolid», sentencia Grimau.

Dos derrotas acompañaron en pretemporada a los morados ante el conjunto pucelano. La primera como un partido de pretemporada y la segunda, en la semifinal de la Copa Castilla y León, donde los de Hugo López pasaron por encima a los palentinos en el Pabellón Municipal, cerrando el partido con un marcador de 78-91.

«Nos ganaron bien en los dos partidos que jugamos en pretemporada. Yo creo que ellos siguen al mismo nivel y nosotros hemos crecido porque jugamos sin Kaspars y sin Felipe. Más que quitarnos la espina, tenemos que hacer un partido mejor que los dos que hicimos en pretemporada y tenemos que ser más competitivos que entonces», afirma Marco.

Grimau tampoco cree que haya espina, de esas que duelen, en el conjunto palentino. «No tenemos ninguna espina clavada de los partidos de pretemporada. Esos encuentros están para trabajar de cara a los partidos oficiales. No creo que tengamos ninguna sensación de venganza ni de revancha, ya que para nosotros son partidos para entrenar y para mejorar», señalaba Grimau, con ganas de firmar la novena victoria de los morados, pero sin rencor tras las derrotas anteriores.

Cierto es que ambos conjuntos están colíderes, pero la rivalidad entre Palencia y Valladolid va más allá de las posiciones en la tabla. «Un derbi siempre es un derbi. No hay que pensar mucho más allá. Es cierto que está el liderato en juego y es nuestro próximo partido y es el más importante. Además van a ir muchos aficionados nuestros a ver el partido, así que esperemos hacer un gran partido», señala Marco. «El derbi es con los dos equipos de la región que están arriba y que llevan haciendo bien las cosas durante muchos años», afirma, por su parte, Jordi Grimau.

Cuarenta minutos tiene Carles Marco junto con Jordi Grimau y el resto de la plantilla del Chocolates Trapa Palencia para lograr hacerse con el derbi y sumar el noveno triunfo de la temporada. «Vamos a tener mucha afición viendo nuestro partido, así que esperemos hacerlo lo mejor posible», analiza Marco.