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Lunes, 3 de junio 2019, 14:31
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A pesar de ser aún joven, afirma que ha cumplido todas sus expectativas profesionales en el mundo del vino, al que lleva toda su vida vinculada y califica como su gran pasión. Gemma Vela Humanes se convirtió en 1995, con tan solo 23 años, en la primera mujer en llegar a ser sumiller en un hotel de lujo de cinco estrellas en España, en concreto el Ritz de Madrid. Formada en Turismo, Enología y Sumillería, previamente ya había trabajado como sumiller en el restaurante Martín Berasategui, en San Sebastián, y en El Amparo, en Madrid. Asimismo, desde el año 1994 es miembro del Comité de Cata del Grupo Gourmets que elabora la 'Guía de Vinos Gourmets'.
Echando la vista atrás, Gemma Vela considera que, durante sus 25 años de trayectoria, la presencia de la mujer en el mundo del vino ha evolucionado de forma positiva. «Afortunadamente, ha cambiado muchísimo, pero recuerdo que al principio chocaba, porque la gente se hacía a la idea que un sumiller es un señor y de cierta edad, y de repente, aparece una chica y joven, porque empecé muy joven, y resultaba extraño», detalla. En este sentido, recalca que en estos años «se han abierto las puertas» y se han alcanzado otros logros como la mayor profesionalidad, la formación y la versatilidad del sumiller, que en la actualidad va mucho más allá del trabajo en la restauración.
En su día a día, Vela explica que trabaja en «poner en valor lo que transmite una copa de vino, y no solo una copa de vino, sino las personas que hay detrás de una botella elaborando ese vino, y es que a veces ese concepto se confunde». Un concepto que, insiste, también intenta trasladar a las nuevas generaciones. Haciendo balance de su trayectoria, la sumiller mantiene que ha logrado cumplir todas sus aspiraciones profesionales, algo de lo que se siente satisfecha. Entre esos logros se encuentra, por ejemplo, el Premio Nacional de Gastronomía Mejor Sumiller 2013. Como ribereña nacida en Aranda de Duero, muestra especial satisfacción por haber sido nombrada embajadora del Consejo Regulador de Ribera del Duero en México en abril 2015, Cofrade de Honor de los vinos de Ribera del Duero o haber formado parte en tres ocasiones del Comité de Cata de Calificación de la añada de la zona de calidad. Su espinita está en no haber calificado ninguna de esas cosechas como 'Excelente', algo que cree que se hará realidad en un futuro próximo.
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