Cocina viajera de raíz tradicional
Isabel González y Teresa Cordero, del bar vallisoletano Puerto Chico, ganan el campeonato regional de tapas con su creativa 'Ganeca'
Ocho trofeos se camuflan de forma discreta entre las copas y botellas de la estantería del Bar Puerto Chico, un local de estilo náutico valisoletano que ofrece al comensal la mejor versión de su cocina, la de esencia viajera, aunque ligada siempre a la raíz de la cocina tradicional. Isabel González y Teresa Cordero, conforman un matrimonio profesional que lleva veinte años de feliz convivencia entre fogones.
Acaban de ganar el II Campeonato de Tapas y Pinchos de Castilla y León, certamen que se celebró hace quince días en Palencia y en el que se impusieron ante más de 50 creadores culinarios de la región con su pincho 'Ganeca', un homenaje de raíces históricas a la gallina negra castellana. Pese a que ganar no es nuevo para ellas, pues a lo largo de su dilatada carrera profesional en su palmarés se encuentran más de trece premios de ámbito provincial, nacional e internacional han recibido este reconocimiento con la ilusión de quien asiste por primera vez a un certamen gastronómico. «Fue toda una sorpresa, ha sido un año muy duro y recibir un reconocimiento así es un empujón, una alegría y una satisfacción por nuestro trabajo, los pinchos que hacemos llevan mucho tiempo y elaboración detrás», explica Teresa, mientras se prepara para entrar en cocina.
El secreto de su éxito reside en su experiencia, el amor por su trabajo, la calidad de sus productos y la creatividad como brújula de su travesía profesional, «continuamente estamos pensando en cosas nuevas, hay que mantener el listón alto. Hacemos muchas pruebas, renovamos la carta, trabajamos mucho con producto de temporada, damos opción a los que se atreven a probar de todo y a los paladares más tímidos. Intentamos que nuestra cocina tenga esa parte de hogar y lo fusionamos con sabor internacional buscando un equilibrio», añade Isabel.
Ambas comparten la misma humildad cuando explican su trabajo y coindicen en que el mejor jurado es el cliente «porque el boca a boca hace mucho y al final son ellos los que prueban y juzgan», puntualiza Teresa, la encargada de elaborar las demandadas croquetas de cecina del Puerto Chico.
Vuelta a la normalidad
Han retomado sus famosas cenas temáticas «cada semana viajas a un parte del mundo sin moverte de Valladolid», explica Isabel. Comenzaron este miércoles con La India «como un pequeño homenaje por lo mal que lo están pasando por la Covid», después vendrá Tailandia, México y un sinfín de nuevas propuestas que se cuecen a fuego lento en su pequeña cocina. Isabel, que sabe lo que es pasar por la enfermedad, explica que tuvo «Covid en enero y aún no he recuperado completamente el gusto que para mí es mi principal herramienta de trabajo», señala mientras echa la vista atrás a un año y medio de cierres, restricciones, incertidumbre y miedo que les puso en la tesitura de miles de empresarios «pensamos si cerrar o no y finalmente decidimos seguir», su válvula de escape fue el servicio a domicilio, «la gente respondió muy bien en el peor momento y también ahora, se nota que hay ganas de volver a disfrutar».