Seis directores rodando en San Fermín

Es un Punto de Encuentro al cuadrado. Blue lips es la película con la que concursan en esa sección pero a la vez el proyecto es el resultado de otro encuentro, el que mantuvieron buena parte del equipo al cumplirse la primera década de haber estudiado juntos en Los Ángeles. Seis países de procedencia, seis historias y un marco de rodaje, los San Fermines de 2012. Allí cada director rodó la minipelícula de su personaje, que luego ensamblaron técnica y narrativamente un mis director artístico, de fotografía y el montador. Los directores proceden de Brasil, Argentina, Estados Unidos, Italia, Canadá y España, y reconocen que han tenido una autoridad por encima de ellos, las productoras Candela Figueira y Maitena Muruzábal.

Vienen vestidos de blanco con el pañuelo rojo. Es la seña de identidad de su película que eligió la muchedumbre internacional de esta fiesta. «La vida va por ciclos y lo que les pasa a nuestro seis personajes es que se ven confrontados a esa masa, ese jolgorio, es una situación límite que no permite la indiferencia. En ese ambiente se ven obligados por distintas razones a resetear su pasado y coger otro tren», explica Nacho Ruipérez (cinta española). «Y todos acaban eligiendo la vida», apunta Julieta Lima (cinta argentina).

A Valladolid ha venido Mariana Cordero, la actriz que encarna a su protagonista, Sagrario. «Es una mujer que traviesa una circunstancia muy especial, se acaba de quedar viuda. Estaba muy enamorada de mi marido, que siempre había corrido los sanfermines, y después de eso, alquilé la casa en Pamplona y me fui con mi hija a Madrid». Tener que renovar la tumba del marido le hace volver a Pamplona y se aloja en la que fue su casa, ahora reformada. «La hace sentir como una marciana», explica Nacho, «cierra las ventanas y la puerta, no quiere saber nada de lo que ocurre fuera». Pero se encontrará con alguien que le cambiará la vida.

Antonello Novellino es el director de la parte italiana. «Vittorio, mi personaje, es un fotógrafo que vive en Roma pero acaba de estar en su ciudad, Matera, porque su padre se está muriendo. Le pide una revista americana que vaya a fotografiar los san fermines. Allí se encuentra con Malena, la protagonista de la película de Julieta».

El personaje de la película de Julieta es una joven que sufre una enfermedad crónica y va a Pamplona a recibir tratamiento. «Malena vive una vida cerrada en sí misma, sobreprotegida por sus padres. Una vez en el hospital decide salir de esa burbuja y se escapa. Se topa con Vittorio y se da cuenta de que tiene que elegir entre vivir o morir por dentro. Y elige la vida».

Menos los cinco primeros minutos de cada historia, rodado en el país de origen, el resto se desarrolla en medio de San Fermín. «Fue un reto técnico, nos vestíamos todos de blanco para hacer de extras si hacía falta, para mezclarnos con la gente», aclara Nacho. El entendimiento previo fue gracias a «la banda ancha de internet y mucho skype». Julieta destaca la exposición abierta, mariana la falta de egos, Nacho, «el punto de atrevimiento, corren tiempos para valientes».