Chano Domínguez: «Tocar con Lizana me hace sentir como pez en el agua»

Chano, después de trabajar durante 7 años en Nueva York, reside ahora en Barcelona. Durante el último año no ha parado en gestar proyectos. Uno de ellos es 'Chambalao' -disco que saldrá próximamente junto a Horacio Fumero y David Xirgu- y otro proyecto en camino es el de una inminente colaboración con Hamilton de Holanda y Rubem Dantas. De momento, toca disfrutar mañana con la materialización de su trabajo junto a Antonio Lizana, sin duda uno de nuestros artistas más potenciales debido a su capacidad de ser cantaor y saxofonita.

–Vuelve a Valladolid, esta vez, acompañado por Lizana. ¿Qué supone para su trayectoria encontrarse con un artista tan singular y completo?

–Pues efectivamente, Antonio es la consecuencia de algo que desde hace más de 40 años venimos haciendo unos cuantos artistas de este país… y que es tocar con el acento español, con nuestras raíces, timbre y sonoridad. Antonio ha crecido escuchándonos y ha creado un universo personal con este lenguaje tan particular que tiene. Para mí, tocar con él, es como si estuviera haciéndolo con dos músicos en el escenario. Es un saxofonista que ha estudiado muy bien el jazz y, por otra parte, tengo a un cantaor flamenco de San Fernando, tierra de Camarón, que se ha criado en un entorno privilegiado para este arte. Antonio me hace sentir como pez en el agua.

–Manel Fortiá al contrabajo y Marc Miralta a la batería. Sin duda, un cuarteto de los competitivos… ¿Qué podemos encontrarnos mañana sobre el escenario del Universijazz?

–En el escenario, este grupo es como un laboratorio. Somos una especie de colectivo de cuatro músicos que reinventa todo lo que cada uno propone. Cuando llamé a Antonio para este proyecto, la premisa era tocar los 'stándars' de jazz que no gustan y hacerlo en clave de nuestro ritmo y de lo que nosotros más sentimos desde dentro.

–Hablemos de 'Chumbulum', su proyecto junto a Horacio Fumero y David Xirgu…

–El disco aún no ha salido aunque ya se ha presentado en algún festival. Es un álbum que tiene canciones escritas durante la pandemia, que me reencuentra con mi trío español con el que trabajo aquí. La pandemia me pilló en mi casa de Barcelona después de estar 7 años en Nueva York… así comencé a componer de nuevo algunas canciones. Y, por otra parte, hay también piezas rescatadas de los años 80, 90 y de los 2000. Es un disco íntegro de temas originales.

–7 años en Nueva York. ¿Qué valoración nos hace de su estancia en la Gran Manzana?

–Nueva York tiene lo mejor y lo peor. Es una ciudad dura, donde todo es complicado. Pero evidentemente, es una ciudad con mucha energía que no para nunca. Me he empapado de música y de grandes músicos. Allí, de repente te llaman, por ejemplo, para una sesión de grabación con el contrabajo de John Patituci o con la batería de Antonio Sánchez. De repente suena el teléfono y es para hacer un 'bolo' con Randy Brecker… En fin… me han pasado cosas fantásticas. Tengo que volver el próximo año cuando todo esté más normalizado ya que he dejado varios proyectos allí que se quedaron a medias.

–Tras su paso mañana en Universijazz ¿Tiene algún proyecto en mente que nos quiera destacar?

–Sí. Quiero destacar un disco próximo con un músico brasileño que toca la mandolina, que es Hamilton de Holanda. Será un trío con la percusión de Rubem Dantas, el percusionista que metió por primera vez el cajón en el flamenco con Paco de Lucía.

Universijazz. Chano Domínguez & Antonio Lizana Quartet. 15 julio. 22:00 h. Puntos de venta: www.entradas.uva.es.