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Mark Haddon, relatos más allá de los géneros

Mark Haddon, relatos más allá de los géneros

El escritor británico aborda los contrastes del ser humano en el libro de cuentos 'El hundimiento del muelle'

Álvaro Soto

Madrid

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Domingo, 3 de junio 2018

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Hace ya 15 años de 'El curioso incidente del perro a medianoche', la novela que lanzó a la fama al escritor británico Mark Haddon (Northampton, 1962). Las aventuras de aquel adolescente con asperger cuyos capítulos estaban categorizados con números primos proporcionó al autor el éxito en las listas de ventas y también en la crítica: ganó el premio a Libro del Año de Withbread y el premio del Guardian, entre otros. En esta década y media no se ha prodigado en la literatura demasiado Haddon. En 2006 publicó 'Un pequeño inconveniente' y desde entonces, se ha dedicado a la literatura infantil y juvenil, a guiones para películas y series de televisión (ha ganado dos Bafta) y a la enseñanza en la Universidad de Oxford, además de volcarse en el trabajo con personas con discapacidad. Ahora acaba de regresar a las librerías con 'El hundimiento del muelle' (Malpaso), un libro de relatos que pretende «ir más allá de los límites establecidos en cada uno de los géneros».

En sus nueve historias cortas, que parecen independientes, pero que en realidad están unidas, Haddon reflexiona sobre la soledad y las relaciones humanas a través de personajes que sufren situaciones críticas: abandonados en una isla desierta, salvados de morir ahogados o empujados a la violencia por el destino.

«Los seres humanos se muestran de manera completa cuando son sometidos a sus límites», subraya. «No fue intencionado que hubiera conexión entre las historias. Las escribí durante mucho tiempo, pero al final de cada una llegué por caminos diferentes», cuenta el autor, que se ha inspirado tanto en los mitos clásicos como en el realismo contemporáneo, pero tratando de alejarse de la pura belleza formal para alcanzar historias que tengan una gran profundidad. «No puedes esperar que el lector preste atención a un libro solo porque las historias estén bien escritas, un defecto que aparece en muchos relatos contemporáneos», señala.

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